Las autoridades chilenas tienen la intención de tratar la línea de crédito como financiamiento precautorio

El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) se ha reunido en una sesión informal para discutir una solicitud de las autoridades chilenas para un acuerdo de dos años bajo la Línea de Crédito Flexible (LCF) con el FMI por un monto equivalente a 23.800 millones de dólares.

Las autoridades chilenas tienen la intención de tratar la línea de crédito como financiamiento precautorio.

Esta línea de crédito “que está disponible solo para países que tienen muy sólidos fundamentos macroeconómicos, tiene por objeto proteger a las economías ante eventuales shocks externos al proporcionar un acceso amplio y por adelantado a los recursos del FMI, sin condiciones ex post”.

Desde el Banco Central de Chile señalan que el acceso a esta línea “forma parte de su estrategia para fortalecer su instrumental frente al riesgo de que se acentúen o prolonguen las condiciones económicas adversas derivadas de la crisis sanitaria”.