Uno de los factores claves para el éxito de las estrategias de desarrollo, sobre todo para el establecimiento de los diagnósticos, la planificación y la evaluación de las acciones emprendidas es la disponibilidad y el acceso a unas buenas fuentes de información. De esta manera, en el presente artículo se realizará una descripción de la información socioeconómica disponible en Andalucía, desde el punto de vista de las fuentes existentes, centrándonos en su accesibilidad y calidad de los datos disponibles. Es decir, por una parte en la facilidad de la obtención de datos: peticiones, respuestas dadas, calidad de las publicaciones; y por otra, la calidad de los datos disponibles: actualización, cruces de datos, ámbitos geográficos y sectoriales concretos, caracterización, etc.

De esta manera, podemos empezar afirmando que la principal fuente de información socioeconómica disponible en Andalucía es el Instituto de Estadística de Andalucía (IEA), pues posee unas buenas bases de datos, bien estructuradas y disponibles por Internet. Aunque hay que señalar que estos se pueden mejorar debido por una parte a su falta de actualización en variables concretas y por otra, porque se emplea para la definición de sus variables los mismos ámbitos geográficos que el Instituto

Nacional de Estadística. Es decir la provincia, quedando al margen desagregaciones que deberían de afrontar el IEA como las comarcas y las áreas metropolitanas, sobre todo teniendo en cuenta que se dispone del último censo poblacional por municipios.

Con respecto a los padrones municipales y otras fuentes municipales, aunque la accesibilidad es buena, los datos en ocasiones no se adecuan a las necesidades, debido a que los mismos no están tratados de manera que se les pueda sacar el máximo provecho. Los datos contenidos en el Padrón están muy enfocados a la ordenación municipal electoral y fiscal. Pero sin embargo, con otro tratamiento, los datos se podrían focalizar para el de-sarrollo de los municipios, aprovechándose sinergias. Sobre otras fuentes municipales, destacar que los datos fiscales en referencia al IAE son muy poco accesibles, aunque están disponibles, pues por ejemplo se suministran a las Cámaras de Comercio para el cobro de la cuota cameral. Destacar también otras fuentes de información como son base Argos, las Cámaras de Comercio, las Consejerías de la Junta, el Consejo Económico y Social de Andalucía y las Universidades.

Mención aparte, merecen los datos suministrados por el Ministerio de Trabajo en general y el Instituto Nacional de Empleo en particular, puesto que aunque tienen disponibilidad a los datos, ésta es sólo a través de publicaciones periódicas que pierden su vigor cuando salen a la luz. En ocasiones y en casos esporádicos consiguen información de las Delegaciones Provinciales. Pero la principal fuente de información que se dispone, que se necesita, pero que sin embargo no se tiene disponible es la contenida en las diferentes oficias del INEM. En este sentido, se hace necesaria una colaboración más estrecha entre el SAE y el INEM con el fin de facilitar la información disponible sobre empleo y desempleo en cada unas de las oficinas compartidas de empleo. Esta misma argumentación se podría ampliar para la obtención de datos sobre ocupación y tipo de ocupación (cuenta propia y cuenta ajena) en lo que respecta a la Tesorería de la Seguridad Social.

Con respecto a la información suministrada por las Diputaciones Provinciales a través de sus centros de estudios, destacar la desagregación de datos en ámbitos inferiores a la provincia, aunque los datos no están muy actualizados.

Los Registros Mercantiles, tienen una accesibilidad bastante restringida, e incluso se cobra por el suministro de datos; y por otra parte los datos disponibles también se suministran de una manera poco operativa sin un tratamiento estadístico previo. A este respecto, destacar la Central de Balances de Andalucía que dispone de la información de los registros mercantiles ya elaborados y tratados posteriormente, aunque encuentran problemas para un nivel de desagregación local. Con respecto a otros registros empresariales, como por ejemplo el de empresas de Economía Social, no existe una buena información al respecto y sería muy interesante alguna publicación periódica que recogiera esta información.

Con respecto a datos sobre discapacidad, destacar la base de datos del Centro de Valoración de Discapacidad de la Junta de Andalucía, aunque éste no se conoce prácticamente. Generalmente, para la obtención de estos datos se suelen em-plear información disponible de las personas usuarias de los centros de servicios sociales de los diferentes Ayuntamientos.

En definitiva, se podría mejorar las bases de datos de información socioeconómica para la elaboración de estrategias de de-sarrollo, evitando fundamentalmente la dispersión de datos en diferentes fuentes estadísticas, fomentado una coordinación entre las diferentes fuentes, una adecuación del tratamiento de los datos. Y sobre todo, intentando lograr unos niveles de desagregación que lleguen a ámbitos geográficos inferiores a la provincia.

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