El FMI advierte: todavía existen problemas estructurales profundos que limitan el potencial de crecimiento de España de cara al futuro y persisten vulnerabilidades.

STX06 WASHINGTON (EE.UU.), 22/4/2012.- La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, comparece en una rueda de prensa después de la reunión del Grupo Consultivo africano en el marco de las reuniones de primavera del FMI y del Banco Mundial, en Washington DC, Estados Unidos, hoy, domingo 22 de abril de 2012. EFE/Shawn Thew

Así lo ha expresado el organismo internacional tras la conclusión de la Consulta del Artículo IV con nuestro país. Ha señalado que el elevado desempleo estructural y la persistente dualidad del mercado laboral, así como la falta de economías de escala de las numerosas empresas pequeñas, frenan el crecimiento a mediano plazo.

Para el FMI, los niveles de endeudamiento público y privado continúan siendo altos y probablemente seguirán afectando al consumo y la inversión. “España mantiene una elevada posición de inversión internacional neta negativa, lo que aumenta sus vulnerabilidades externas”, indican.

“En este contexto, un riesgo clave es una reversión de las reformas ya implementadas, lo que generaría incertidumbre y podría frenar la recuperación, sobre todo si el entorno exterior se deteriora drásticamente”, argumentan.

Pese a ello, los directores ejecutivos han elogiado a las autoridades por la adopción de políticas sólidas y las reformas llevadas a cabo, las cuales, complementadas por condiciones financieras más favorables, han mejorado la confianza y respaldado el notable repunte registrado en España desde la crisis.

“Las reformas llevadas a cabo están contribuyendo a la recuperación. Las reformas laborales y un crecimiento moderado de los salarios han apuntalado al empleo y ayudado a recuperar la competitividad”, apuntan.

Subrayaron que para respaldar el ritmo de crecimiento a mediano plazo es necesario seguir avanzando en la consolidación fiscal “y en la sólida implementación de reformas para abordar las rigideces estructurales que aún persisten, así como también contar con condiciones de demanda favorables en la zona del euro en su conjunto”.

Han recomendado alinear los salarios con la productividad y las condiciones económicas a nivel de las empresas, reducir la dualidad del mercado laboral y mejorar la formación de los parados de larga duración.

Asimismo, han considerado “conveniente” seguir mejorando el mercado laboral y las condiciones para que las pequeñas y medianas empresas crezcan, “con el objeto de generar empleo y promover un crecimiento más elevado e inclusivo”.