Los créditos concedidos a las familias españolas para la adquisición de una vivienda mostraron en noviembre pasado leves signos de desaceleración, ya que, aunque crecieron por encima del 23%, lo hicieron a la tasa más baja desde mayo, informa Efe.

Según el Banco de España, el volumen de los préstamos entregados a las familias y destinados a la compra de una vivienda ascendía a finales de noviembre a 368.511 millones de euros, lo que supone 69.000 millones o un 23,1% más que un año antes. Ese ritmo de crecimiento, aunque fuerte, confirma que la concesión de créditos hipotecarios se ha relajado levemente desde que en septiembre tocó techo al avanzar un 23,8%, la tasa más elevada desde que empezó el ciclo expansivo del sector hipotecario, en 1995. En 2004 el Banco de España intensificó sus avisos para que las entidades moderasen la concesión de créditos por el alto endeudamiento familiar.