Banco Santander obtuvo un beneficio atribuido de 3.605 millones de euros en el primer semestre de 2017, lo que supone un incremento del 24% comparado con el mismo periodo del año anterior, gracias al aumento de los ingresos de la actividad con clientes, la disciplina de costes y la continua mejoría en las provisiones para insolvencias.

Banco Popular, que Santander adquirió el 7 de junio de 2017, aportó 11 millones adicionales al resultado del Grupo, lo que eleva el beneficio atribuido en la primera mitad del año a 3.616 millones de euros y a 1.749 millones de euros el beneficio atribuido al segundo trimestre, un 37% más que en el mismo trimestre del año pasado.

En los últimos doce meses, el Grupo ha sumado 1,9 millones de clientes vinculados (excluido Popular). El crédito y los recursos de clientes se incrementaron un 1% y un 8%, respectivamente, en euros constantes.

La diversificación entre mercados emergentes y maduros sigue siendo una de las fortalezas de Santander. Brasil contribuyó el 26% al beneficio atribuido, Reino Unido, el 17% y España, el 13%.

Santander ha mantenido su posición como uno de los bancos más rentables y eficientes del mundo. El retorno sobre el capital tangible (ROTE), una ratio clave para medir la rentabilidad, aumentó en 144 puntos básicos en el año, al 11,7%, excluyendo Popular. La ratio de eficiencia se situó en el 46,3%.