Bankia obtuvo un beneficio neto atribuido de 739 millones hasta septiembre, lo que supone un incremento del 1% respecto al mismo periodo del año anterior debido al aumento de los ingresos por comisiones y al descenso tanto de los gastos como de las dotaciones a provisiones por la mejor calidad crediticia.

Por su parte, el beneficio antes de impuestos se situó en 953 millones, un 1,3% más, mientras que el beneficio neto atribuido se elevó a 739 millones, un 1% más que en los nueve primeros meses de 2016. La rentabilidad sobre fondos propios se situó en el 8,1%

bankia-sede-madrid-mini-690x300 (2)El margen de intereses alcanzó 1.467 millones, un 10,1% menos que en el mismo periodo de 2016, como consecuencia de un entorno de tipos de interés en negativo que sigue afectando a la cartera hipotecaria del banco, mayoritariamente referenciada a tipos de interés variables, y al rendimiento de los bonos de la Sareb, cuya rentabilidad se ha situado próxima a cero.

Los ingresos por comisiones han crecido un 4,1%, hasta 636 millones, por el aumento del número de clientes y su mayor vinculación, que se ha reflejado en mayor medida en la generación de ingresos en los medios de pago, fondos de inversión y seguros.

El margen bruto frenó su caída hasta el 2,5% una vez que el resultado por operaciones financieras creció un 70,6%, hasta 314 millones,  consecuencia de las ventas de carteras de renta fija principalmente en los dos primeros trimestres del año como anticipación a la previsible evolución de los tipos de interés.

El saldo de riesgos dudosos se redujo un 11,2% desde el inicio de año, hasta 10.194 millones, con lo que la tasa de morosidad cayó en un punto porcentual, hasta el 8,8%, mientras la tasa de cobertura quedó en el 53,8%.