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<\/h3>\n<\/h3>\nEconomistas de CaixaBank Research<\/p>\n
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El 2021 ser\u00e1 un a\u00f1o a\u00fan dominado por la pandemia, aunque se espera que sea el a\u00f1o en el que la econom\u00eda espa\u00f1ola inicie un intenso proceso de recuperaci\u00f3n. Es probable que las medidas que se han tenido que tomar a finales de 2020 para combatir la segunda oleada de contagios tengan cierta continuidad en los primeros meses de 2021. Sin embargo, confiamos en que la disponibilidad de una vacuna en los pr\u00f3ximos meses, junto con un uso m\u00e1s intensivo de test r\u00e1pidos, permitir\u00e1 mantener la pandemia bajo control sin tener que recurrir a medidas tan restrictivas como las impuestas hasta ahora. En este sentido, prevemos que el avance de la actividad coja vigor a partir del segundo trimestre, cuando los colectivos de mayor riesgo ya deber\u00edan estar inmunizados, y la movilidad internacional pueda recuperarse con m\u00e1s fuerza, con el consiguiente impacto positivo para el turismo.<\/p>\n
En su conjunto, prevemos que el crecimiento de la econom\u00eda en 2021 se emplace en torno al 6,0%. Si ponemos el foco en Andaluc\u00eda, la perspectiva de crecimiento para 2021 es del 5,0%. Esta cifra, algo menor que la del conjunto del pa\u00eds, se debe a que el retroceso de la actividad en 2020 en Andaluc\u00eda ha sido menor que la de del conjunto de Espa\u00f1a y, por tanto, el efecto rebote en 2021 tambi\u00e9n ser\u00e1 m\u00e1s contenido. Con todo, a pesar del elevado ritmo de recuperaci\u00f3n, prevemos que tanto la econom\u00eda del conjunto del pa\u00eds, como la de Andaluc\u00eda, se sit\u00faen en 2021 un 6,2% por debajo del nivel de PIB pre-crisis.<\/p>\n
Las cicatrices econ\u00f3micas de la COVID-19. <\/strong>La econom\u00eda se recuperar\u00e1 en los pr\u00f3ximos a\u00f1os, pero dejar\u00e1 algunas cicatrices importantes. Por ello, ser\u00e1 indispensable realizar las pol\u00edticas econ\u00f3micas adecuadas para que estas cicatrices se puedan cerrar en el menor tiempo posible.<\/p>\n El mercado laboral se ir\u00e1 recuperando en 2021, aunque las pol\u00edticas en el \u00e1mbito laboral deber\u00e1n acompa\u00f1ar dicha recuperaci\u00f3n para evitar que los sectores m\u00e1s afectados por la pandemia -turismo, ocio y hosteler\u00eda- salgan con cicatrices profundas. As\u00ed, los ERTE todav\u00eda ser\u00e1n una herramienta importante en la primera mitad de 2021 aunque de forma selectiva y temporal.<\/p>\n Otra cicatriz que habr\u00eda que cerrar de forma r\u00e1pida es el aumento de la desigualdad. Las consecuencias sociales de las crisis tardan tiempo en aflorar: el porcentaje de la poblaci\u00f3n en riesgo de pobreza en Espa\u00f1a aument\u00f3 entre 2013 y 2015, justo cuando lo peor de la anterior crisis ya hab\u00eda pasado y la econom\u00eda ya encaraba una incipiente recuperaci\u00f3n. De ah\u00ed la importancia de continuar desarrollando pol\u00edticas inclusivas -en 2020 el aumento del \u00edndice de Gini entre febrero y septiembre fue de 2 puntos teniendo en cuenta las transferencias del sector p\u00fablico, aunque hubiera sido de 4 puntos en su ausencia, seg\u00fan el monitor de desigualdad de CaixaBank Research- que permitan que la recuperaci\u00f3n llegue a todo el mundo(1)<\/sup>.<\/p>\n Finalmente, 2021 ser\u00e1 tambi\u00e9n un a\u00f1o importante para nuestro tejido productivo. Es importante que las empresas espa\u00f1olas salgan fuertes de esta pandemia de forma generalizada. Para ello habr\u00e1 que compaginar el alivio financiero a las empresas viables m\u00e1s afectadas para que su solvencia no se deteriore -por ejemplo, v\u00eda recapitalizaciones y ayudas directas- junto con pol\u00edticas estructurales que adapten el tejido productivo a un mundo post-pandemia m\u00e1s digital y verde.<\/p>\n La esperanza de los fondos europeos NGEU. <\/strong>El Fondo de Recuperaci\u00f3n Europeo, Next Generation EU (NGEU), representar\u00e1 una oportunidad \u00fanica para modernizar la econom\u00eda espa\u00f1ola y aumentar su crecimiento potencial. En 2021 Espa\u00f1a presentar\u00e1 su Plan de Recuperaci\u00f3n a la Comisi\u00f3n Europea y, tras su previsible aprobaci\u00f3n a mediados de a\u00f1o, empezar\u00e1 a recibir fondos que totalizar\u00e1n unos 72.000 millones de euros en transferencias no reembolsables entre 2021 y 2026.<\/p>\n Se trata de una cantidad muy elevada y es clave que se aproveche para dise\u00f1ar un plan de inversiones inteligente, centrado en las infraestructuras y las transiciones verde y digital, acompa\u00f1ado de reformas que aborden los retos estructurales de la econom\u00eda (temporalidad del mercado laboral, educaci\u00f3n y FP, innovaci\u00f3n…).<\/p>\n Seg\u00fan nuestras estimaciones, basadas en supuestos muy conservadores (el gobierno ejecuta tan solo la mitad de los fondos contemplados en el presupuesto), la contribuci\u00f3n del NGEU al PIB en 2021 ser\u00eda de 1,0 p.p. En definitiva, los fondos europeos son la piedra angular para que en 2021 las pol\u00edticas econ\u00f3micas impulsen el crecimiento econ\u00f3mico.<\/p>\n(1) El aumento del \u00edndice de Gini entre febrero y septiembre en Andaluc\u00eda fue de 1,8 puntos teniendo en cuenta las transferencias del sector p\u00fablico, y de 3,3 puntos en su ausencia.<\/h6>\n
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