{"id":30258,"date":"2013-04-04T14:45:58","date_gmt":"2013-04-04T14:45:58","guid":{"rendered":"http:\/\/www.agendaempresa.com\/?p=30258"},"modified":"2018-01-09T18:49:30","modified_gmt":"2018-01-09T17:49:30","slug":"teatro-de-la-maestranza","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/www.agendaempresa.com\/30258\/teatro-de-la-maestranza\/","title":{"rendered":"Teatro de la Maestranza"},"content":{"rendered":"
Tras casi medio siglo de existencia, con una discograf\u00eda ampl\u00edsima y una intensa actividad que le permite ofrecer m\u00e1s de 100 conciertos cada temporada, el Tokyo String Quartet, nacido en la prestigiosa Juilliard School de Nueva York, ha decidido disolverse y retirarse del escenario internacional, aduciendo una raz\u00f3n convincente: la jubilaci\u00f3n\u00a0 de dos de sus miembros y la constataci\u00f3n por parte de los dos restantes de la imposibilidad de sustituirles, lo que supondr\u00eda, en palabras de Ismael G. Cabral, autor de las notas al programa, “contemplar el ocaso de una agrupaci\u00f3n se\u00f1era en la historia de la interpretaci\u00f3n de la segunda mitad del siglo XX”. En su despedida, el Tokyo ofreci\u00f3 el “Cuarteto en Fa mayor, K.499” (Hoffmeister) de Mozart, obra de profundo apasionamiento, en donde el estilo contrapunt\u00edstico juega un papel esencial, a la que sigui\u00f3 el “Cuarteto de cuerdas 1905” de Anton Webern, uno de los integrantes de la II Escuela de Viena, quiz\u00e1 el que tuviese un mayor impacto en futuros compositores, pese al escaso reconocimiento de que fue objeto en vida. La hist\u00f3rica velada se cerr\u00f3 con una de las obras maestras de la m\u00fasica de c\u00e1mara: el “Quinteto para piano y cuerdas en Fa menor, Op.34” de Brahms, con su dram\u00e1tico primer movimiento, el esp\u00edritu schubertiano del andante, el ritmo intenso y \u00e1spero del scherzo y el intenso lirismo del finale, con el protagonismo del pianista Javier Perianes, uno de los j\u00f3venes valores m\u00e1s s\u00f3lidos del panorama internacional.<\/p>\n
Las ovaciones entusiastas del p\u00fablico que llenaba el Maestranza expresaban, no sin cierto aire de pesadumbre, el adi\u00f3s a una agrupaci\u00f3n\u00a0 cuya impronta en el complejo mundo de la m\u00fasica de\u00a0 c\u00e1mara ser\u00e1 dif\u00edcil de borrar.<\/p>\n
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