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"Conozco ese refr\u00e1n", me dijo Don Contradictorio,\u00a0 y es lo que yo les he dicho a un grupo de mis amigos que son abogados: uniros en buena armon\u00eda, y multiplicareis los servicios que podr\u00e9is ofrecer a los clientes y con precios m\u00e1s baratos. As\u00ed es que mi consejo les ha servido para crear un despacho de abogados, que atienden a cualquier pleito, hasta hay quien se ocupa de asuntos del extranjero, porque habla muy bien ingl\u00e9s. Anda que no se lo que dir\u00eda mi admirado torero y amigo Cagancho, que una vez que fue a M\u00e9xico le preguntaron en la frontera si hablaba ingl\u00e9s y contest\u00f3: "ni lo quiera Dios". <\/p>\n
– Eso lo cuento para que sepas como eran los toreros de mi \u00e9poca, no para que cambies de tema en tu articulillo, que bueno, digo que es tuyo, porque soy generoso.<\/p>\n
– Est\u00e1 bien -le contest\u00e9- digamos de los dos, no nos vamos a pelear. <\/p>\n
Pues volviendo al tema, eso de agruparse los profesionales, no es nuevo, pero hoy est\u00e1 alcanzando mayor importancia. Y digo que no es nuevo porque, yo que he ido mucho por Logro\u00f1o, all\u00ed hay una calle que se llama 'de los elefantes', en la que en cada casa hay una taberna, todas llenas de tentaciones de comida y buenos vinos riojanos. Por eso con frecuencia los clientes, salen de la calle totalmente 'trompas', de ah\u00ed su sobrenombre. Al estar agrupadas las tabernas, el que no pica en una pica en la otra, as\u00ed todos se ayudan al conseguir muchos y variados clientes. Y \u00e9stos saben, que en la calle Laurel -que es su verdadero nombre- encontrar\u00e1n buena calidad y variedad en lo que buscan: pinchos y buen vino.<\/p>\n
As\u00ed es que este fen\u00f3meno de formaci\u00f3n de sociedades en que se agrupan varios profesionales u oficios, se est\u00e1 extendiendo en Andaluc\u00eda como una consecuencia del desarrollo econ\u00f3mico, tanto en las actividades de la agricultura, como en las industriales o de servicios. Es esto una consecuencia de la mayor explotaci\u00f3n de los recursos naturales y las potencialidades que el desarrollo va creando. En ello tenemos que tener muy presente el cultural, tanto en su faceta universitaria y de investigaci\u00f3n, como en otras manifestaciones en las que el aut\u00e9ntico folklore juega un papel importante.<\/p>\n
– Ahora, d\u00e9jame meter la cuchara a m\u00ed, que me has largado un buen rollo. Y hablando en tus t\u00e9rminos de norma, para que me entiendas. Dime qu\u00e9 requisitos tienen que cumplir las agrupaciones.<\/p>\n
– Pues t\u00fa mismo lo puedes decir. No te voy a descubrir nada nuevo: deben de cumplir con el requisito de la calidad.<\/p>\n
– Pero eso es una frase -me dijo\u00a0 mi amigo-. Eso suena muy bien, pero no se entiende. Porque te pongo en un aprieto si te pregunto, \u00bfc\u00f3mo lo mides?<\/p>\n
– Pues el aprieto es grande. T\u00fa mismo me vas a sacar de \u00e9l. Si los servicios que reciben los clientes son satisfactorios, la calidad es buena. Y los clientes, volver\u00e1n. Por lo tanto la medida de la calidad, est\u00e1 en la satisfacci\u00f3n de los clientes. Creo que te he descubierto el hilo negro. Otra cosa es c\u00f3mo conseguir ese resultado. En ello si puede ayudar una aplicaci\u00f3n, no dogm\u00e1tica sino creadora de los principios de las normas ISO, la que se adapte mejor a la actividad que se desempe\u00f1e. Si es que se estima que la obtenci\u00f3n del certificado de calidad de la ISO puede ayudar a consolidar la agrupaci\u00f3n, a atraer m\u00e1s clientela, habr\u00e1 que cumplir los requisitos previstos en la norma. Eso no ser\u00e1 dif\u00edcil, si la l\u00f3gica de funcionamiento de un sistema, ha sido respetada en la organizaci\u00f3n correspondiente. Y en todo caso, hacer las correcciones que se deduzcan, ayudar\u00e1n al buen funcionamiento del sistema.<\/p>\n
– Pues mira -me dijo Don Contradrctorio- me est\u00e1s convenciendo y voy a ponerme en contacto con mis amigos los fabricantes de 'somiers' para que nos agrupemos, porque nuestro gremio est\u00e1 pas\u00e1ndolo mal, con las modernidades, hace somiers con madera. Lo malo es que resultan hasta c\u00f3modos. Es que estas modernidades nos han hecho perder los colchones de lana, que tan bien iban con mis \u2018somieres', ya no hay colchoneros para varear la lana y rehacer los colchones. Ya s\u00f3lo est\u00e1n los colchoneros del equipo de f\u00fatbol Atl\u00e9tic de Madrid.<\/p>\n
– Amigo m\u00edo. Modern\u00edzate, y ponte en sinton\u00eda con Andaluc\u00eda, que va a buen ritmo.<\/p>\n