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"Conservar nuestra lengua es como conservar la llave de nuestra prisi\u00f3n"\u00a0 (A.Daudet)<\/p>\n
La prensa, la radio o, incluso, la televisi\u00f3n deber\u00edan ser -y as\u00ed ha venido sucediendo desde sus or\u00edgenes- fuente de aprendizaje y, en ocasiones, prolongaci\u00f3n, cuando no sustituci\u00f3n, de la escuela, debido a la influencia que ejercen sobre millones de destinatarios cuyo modelo ling\u00fc\u00edstico es aquello que leen o escuchan a diario. No obstante, herramientas tan poderosas pueden convertirse\u00a0 en arma de doble filo a poco que se observe el mal uso que hacemos del idioma, consecuencia de la improvisaci\u00f3n, de la ausencia de esa "soba postrera", recomendada por Ortega, que ayuda a despejar dudas; tambi\u00e9n de ignorar a quienes nos precedieron en el arte de la narraci\u00f3n: escritores, acad\u00e9micos, ilustres colaboradores que crearon estilo y marcaron pautas sustentadas en el sentido com\u00fan y que, parad\u00f3jicamente, se ven quebrantadas por quienes deber\u00edamos comportarnos como sus principales valedores.\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 <\/p>\n
Hagamos un recorrido, pues, por algunas 'perlas' escuchadas o le\u00eddas durante los \u00faltimos meses. As\u00ed, por ejemplo, en una corrida televisada, el locutor, tras el primer par de banderillas, dijo que X "hab\u00eda de reubicarse nuevamente en el ruedo", lo que traducido a un lenguaje claro -y taurino- ven\u00eda a decir que 'el diestro ten\u00eda que volver a colocarse en el sitio adecuado para repetir tan arriesgada suerte'. Huelga a\u00f1adir que reubicarse carece de registro acad\u00e9mico.<\/p>\n
En referencia a un buque siniestrado en la bah\u00eda de Algeciras, se comentaba la "posibilidad de ruptura del casco". El diccionario, como he comentado en alguna ocasi\u00f3n, define y explica,\u00a0 mas no tiene por misi\u00f3n aconsejar acerca de la elecci\u00f3n de un t\u00e9rmino u otro; ello ocurre con 'ruptura' y 'rotura', puesto que, aunque ambas\u00a0 coinciden en la primera de las acepciones del DRAE, a continuaci\u00f3n \u00e9ste nos aclara que 'ruptura' se refiere al "rompimiento de relaciones entre las personas", en tanto que 'rotura' se aplica a la "raja y quiebra de un cuerpo s\u00f3lido". Otro caso similar : la cat\u00e1strofe a\u00e9rea ocurrida en Brasil pudo deberse "a la falta de adhesi\u00f3n de la pista de aterrizaje, debido a una intensa lluvia". Como en el caso precedente,\u00a0 la primera de las definiciones del DRAE coincide en 'adhesi\u00f3n' y 'adherencia' ("uni\u00f3n f\u00edsica …"), para aclarar seguidamente que 'adhesi\u00f3n' es una "declaraci\u00f3n p\u00fablica de apoyo a algo o a alguien", en tanto que 'adherencia', en f\u00edsica, es "la resistencia tangencial que se produce en la superficie de contacto de dos cuerpos cuando se intenta que uno se deslice sobre otro".<\/p>\n
Con motivo de un desgraciado accidente que cost\u00f3 la vida a un ciclista en Conil, la televisi\u00f3n mencionaba "la dificultad de las labores de rescate de la recuperaci\u00f3n del cuerpo". El mismo medio, al dar la noticia del nacimiento de un hipop\u00f3tamo en un zool\u00f3gico de la regi\u00f3n, nos aclaraba que "el hipop\u00f3tamo es un animal vegetariano", t\u00e9rmino que cre\u00edamos aplicable a las "personas en cuya alimentaci\u00f3n entran exclusivamente vegetales o substancias de origen vegetal",\u00a0 por lo que el susodicho paquidermo debe clasificarse dentro del grupo de los herb\u00edvoros.<\/p>\n
Los trabajadores de la empresa de autobuses TUSSAM "han retomado de nuevo las negociaciones"; "se han reiniciado las obras de mejora del firme". En ambas noticias podr\u00eda haberse utilizado 'reanudar', 'continuar' o incluso 'recomenzar' pues, aparentemente, lo que ya se ha iniciado no se puede volver a iniciar. Un ejemplo m\u00e1s de redundancia: "La dolorosa efem\u00e9ride hizo revivir otra vez los terribles acontecimientos de aquellos d\u00edas". <\/p>\n
La sumisi\u00f3n a la parla de moda nos aporta, entre otras novedades, implementar, procedente del ingl\u00e9s: "pr\u00f3ximamente se va a implementar el servicio". Si bien su uso est\u00e1 admitido, especialmente en inform\u00e1tica, pienso en sin\u00f3nimos tales como 'implantar', 'instalar' 'ejecutar', 'aplicar' o 'poner en pr\u00e1ctica'. Tampoco faltan los galicismos: "Las autoridades han remarcado la importancia de la nueva ley", cuando lo correcto ser\u00eda 'recalcar', 'subrayar' o 'llamar la atenci\u00f3n'; otro tanto sucede con acordar – "determinar o resolver de com\u00fan acuerdo o por mayor\u00eda de votos" -, verbo indebidamente empleado con las acepciones de 'conceder', 'otorgar' o 'poner a otros de acuerdo'.<\/p>\n
En fin, estos y otros ejemplos reflejan una limitaci\u00f3n l\u00e9xica\u00a0 alarmante: palabras 'multiusos', t\u00f3picos, verborrea huera, lenguaje tribal (SMS)…Y lo que resulta a\u00fan m\u00e1s inquietante: el enemigo 'en casa'.<\/p>\n