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        Revista de febrero de           Agenda de la Empresa

 

Desde los inicios de mi actividad como empresaria participo en las organizaciones empresariales.

En un primer momento, coadyuvando en la creación de la asociación de empresarias de mi provincia y construyendo y diseñando una política de actuación común entre todas y, para todas las organizaciones de empresarias existentes o que se iniciaban en Andalucía, convencidas que solo desde una unidad de acción, desde una participación estructurada y, los liderazgos transformadores compartidos, podíamos intervenir en las estructuras del sistema para cambiarlas.

A partir de entonces, mi compromiso con las organizaciones empresariales en general y con las redes empresariales femeninas en particular, deviene de dos firmes convencimientos; de un lado, creo que cada una de nosotras debe devolver a la sociedad, un poco de lo mucho de oportunidad que aquella le ha dado; de otro, mi creencia y confianza en las redes formales, aquellas que permiten articular una participación estructurada, eficaz y eficiente de la ciudadanía en determinados niveles de los procesos de toma de decisiones.

Las redes informales para nosotras han existido siempre, redes de contacto naturales, que nos han proporcionado apoyo, sororidad… pero los tiempos actuales requieren otros objetivos, fuera del alcance del “espejismo de la igualdad” que en la actualidad vivimos; propósitos que deben disolver de forma definitiva estereotipos, roles y prejuicios, atendiendo a nuestras necesidades (hoy irresueltas) y al amplio listado de asignaturas pendientes.

En este escenario, es donde la organización que presido cobra importancia, donde tiene su razón de ser y donde se posiciona inequívocamente.

La Federación Andaluza de Mujeres Empresarias es una organización de organizaciones que defiende los legítimos intereses de las empresarias andaluzas, desde una óptica de género y, por ello:

  • Desarrolla acciones para reconocer y visibilizar a las empresarias andaluzas.
  • Impulsa la transferencia de modelos empresariales de referencia para el desarrollo del potencial emprendedor.
  • Fomenta el posicionamiento de las empresarias andaluzas en espacios de influencia.

Además, a través de nuestras organizaciones territoriales y sectoriales, contribuimos a la vertebración territorial y a la cohesión social.

Lo hacemos tejiendo alianzas estratégicas con quienes son nuestros homónimos, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME), la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) y sus organizaciones territoriales miembros y, ampliando campos de acción, para así, ir afrontando los grandes retos pendientes: nuestra visibilidad, nuestro reconocimiento institucional y social, el poder e influencia compartidos, la participación con resultados de democracia paritaria en los distintos ámbitos del poder empresarial y económico y, el respeto por los liderazgos.

De esta participación en redes formales, haciendo agenda, y elevando a la pública los grandes retos y desafíos, dependerá la definición de las nuevas metas y el perfeccionamiento de las alcanzadas, porque mujeres y hombres; empresarios y empresarias podemos hacer de este, un mundo más transitable para las unas y los otros, remando en la dirección del sentido común, para que cambie el sistema, el modelo desequilibrado y a todas luces impropio de una sociedad avanzada como la nuestra, para que nosotras, las empresarias, no tengamos que recorrer cada día carreras de cien kilómetros valla.

 

Ana Alonso

Presidenta de FAME

Federación Andaluza de Mujeres Empresarias