Francisco Velasco 
Director EOI Andalucía
EOI – Escuela de Organización Industrial
Introducción:
Convendrán conmigo que finalizar esta tribuna el año pasado con la “apuesta” de que “el 2020 será mucho mejor que el 2019” (eso sí, apelando a una convicción optimista ante la vida), no es el mejor marco/punto de partida para hablar de previsiones para el 2021. Han sido sin duda muy generosos los responsables de Agenda de la Empresa en volver a solicitarme colaboración.
Nudo:
Sin olvidar nunca la crisis sanitaria y las consecuencias de la pandemia en términos de vidas humanas, número de afectados, esfuerzo de los sanitarios, etc., desde un punto de vista económico hemos asistido a un “cisne negro”, un suceso imprevisible o muy raro de alto impacto y consecuencias. Ante eso, poco se puede hacer (o mucho, según se mire), salvo tratar de solucionar el “origen” del problema (vacuna, tratamiento), así como las “consecuencias”, que desde el punto de vista económico supone ayudar a los sectores y colectivos más afectados, mediante un programa excepcional que se financie a medio y largo plazo (dada la excepcionalidad de la situación y a lo improbable de su repetición). Se trata de “salvar al soldado Ryan”, salvar a la totalidad o a la mayor parte del tejido productivo para cuando la situación retorne a la normalidad. Un claro ejemplo lo tenemos en el sector turístico, donde España es una potencia mundial: se trata de mantener esa capacidad para cuando se recupere la normalidad (seguridad y confianza).
Una forma de analizar también los acontecimientos que estamos viviendo es mediante contrafactuales. ¿Cómo hubiera sido todo sin las grandes infraestructuras y capacidades tecnológicas de las que disponemos, que han permitido el teletrabajo, la teleformación, el aprovisionamiento (distribución comercial), incluso el contacto y el ocio durante este periodo? ¿Y sin una potente industria agroalimentaria que ha respondido a la perfección? ¿Y si en lugar de un virus biológico hubiera sido un ataque cibernético de gran escala sobre todas las infraestructuras clave; hubiera tenido más o menos impacto? ¿Y si el desarrollo científico y tecnológico no hubiera permitido el desarrollo de una vacuna en tiempo récord?
Desenlace:
Lo que está claro es que la crisis sanitaria se solucionará, y la crisis económica pasará; pero hay grandes tendencias que permanecerán: la digitalización, la sostenibilidad y la globalización.
En los países desarrollados, más aún en las sociedades occidentales, concurre además el envejecimiento de la población. Habrá que estar muy atentos para aprovecharlas también para la salida de esta situación provocada por la pandemia.
Y ya llegamos al ámbito “micro”, ese al que tanto me gusta referirme porque lo “macro” sale por agregación de lo “micro”, y porque lo “micro” está en nuestro “ámbito de influencia”. ¿Qué podemos hacer nosotros? En primer lugar, tener cierta “visión”, tener la capacidad de tomar decisiones con la vista puesta a medio plazo. El corto plazo aún va a venir muy condicionado, y habrá que ir adaptándonos día a día. Pero aún así hay que mirar y vislumbrar (visionar) “qué queremos ser de mayores”. Hay que atender a las grandes tendencias citadas anteriormente (digitalización, sostenibilidad y globalización), y determinar como queremos posicionar a nuestra organización y nosotros mismos ante ellas.
En segundo lugar, un “call to action”. Hay que hacer, actuar. No se trata de esperar a ver como evoluciona todo. Hay que adelantarse y tomar la iniciativa. Y si luego las circunstancias de contorno cambian y hay que ajustar, o incluso dar marcha atrás, pues se hace. Pero estaremos dando respuesta a cada situación, y en el “movimiento” surgirán las oportunidades.
Epílogo:
Optimismo: no hay que hacer sino un ligero repaso por la historia de la humanidad para ver que está plagada de altos y bajos, siempre en una línea ascendente. Es lo que nos toca vivir, y debemos recordar que nuestro esfuerzo y decisiones modularán el mundo que recibirán generaciones venideras.
Y una última petición: cuídense, y cuiden de los que tienen a su alrededor. Eso sigue siendo lo más importante.
