‘UNICEF, 75 años llevando esperanza a cada niño’, la última cita de los Diálogos OECA
El Observatorio Empresarial para la Consecución de la Agenda 2030 (OECA), promovido por CEA con la colaboración de Unicaja Banco, ha desarrollado su último debate virtual, en el marco de los Diálogos OECA, bajo el título ‘UNICEF, 75 años llevando esperanza a cada niño’, con la participación de Gustavo Suárez Pertierra, presidente de UNICEF España; Enrique Yeves, director del Instituto de Estudios de Naciones Unidas, y el director de OECA, Manuel Bellido, organizador y moderador del debate.
Gustavo Suárez Pertierra, que quiso recordar que “toda la atención que pongamos sobre los niños y sus necesidades es poca”, comenzó señalando que estos años “han sido para UNICEF la historia de su consolidación como un instrumento de referencia extremadamente útil y muy necesario para trabajar por el bienestar de los niños y los jóvenes”, poniendo en valor que los socios y aliados “son el gran capital de UNICEF España, pero tenemos otro aliado, nuestra organización”.
En este sentido, apuntó que, en nuestro país, son “una de las referencias más importantes dentro de los comités del mundo”, añadiendo que España “ha vuelto a convertirse en un país que recibe ayuda de UNICEF”.
Centrado en el tema de la jornada, Gustavo lamentó que el mundo “sigue siendo un lugar complicado para los niños”, ofreciendo un dato revelador: cada día mueren en el mundo más de 14.000 niños menores de cinco años, “muertes que hubieran podido evitarse”, lamentó.
El presidente de UNICEF España habló también de un concepto que emplean en la organización, el de los niños “invisibles”. “Uno de cada cuatro niños menores de cinco años no tiene certificado de nacimiento, no existe, y, por lo tanto, no tiene acceso al estado de bienestar”.
Sobre el acceso a la educación, enfatizó en el hecho de que “para 2030, si seguimos en este ritmo, 60 millones de niños más no habrán tenido acceso”. Además, indicó que “168 millones de niños llevan con la escuela cerrada un año” y recordó que “cada año, 10 millones de niñas son sacadas de la escuela y entregadas en matrimonio”. “El cierre de la escuela no significa solo falta de aprendizaje, de socialización, significa también que en muchos lugares del mundo los menores no pueden tener acceso a una comida en el día y que tienen que trabajar”, añadió.
Gustavo Suárez, que calificó a la sociedad española como “muy solidaria”, destacando el “gran tejido social de organizaciones que trabaja en el mundo de la solidaridad”, enumeró algunos problemas “básicos con los menores” que existen en el país “desde nuestra perspectiva: la pobreza infantil -en Andalucía más-, ya que uno de cada tres niños está en riesgo de pobreza y exclusión, y el abandono escolar temprano, ya que estamos a la cola de los países de Europa”, avanzando la aparición de otros “como el tema de la malnutrición y la obesidad infantil”.
Sobre los menores migrantes no acompañados, indicó que en estos momentos en España “hay más de 9.000, y unos 2.507 en Andalucía, la Comunidad que tiene más niños en sus centros de acogida tras Canarias. Para Gustavo, “hay un problema serio con la determinación de la edad de los niños -difícil cuando no hay documentos oficiales-”, y también aludió a la cuestión de los permisos de residencia. “¿La solución? Planes de país que se combinen con planes de contingencia”.
El presidente de UNICEF España quiso finalizar aseverando que UNICEF “es una organización muy transparente sometida a todo tipo de controles que cuidan de una administración austera, como tiene que ser la de las organizaciones del tercer sector. Lo que pedimos es que los ciudadanos confíen en nosotros y nos acompañen en un compromiso con la infancia”. Y sentenció: “No podemos dejar a ningún niño atrás (como dice nuestro eslogan), los niños son el presente y el futuro, la condición del progreso, y el progreso en la infancia es el progreso de todos”.
Por su parte, Enrique Yeves, director del Instituto de Estudios de Naciones Unidas, puso en valor el trabajo que se está haciendo desde OECA, “muy importante para el conjunto de España”, y coincidió con Gustavo al afirmar que “desde un punto de vista global, la sociedad española es muy solidaria”.
Yeves resaltó que el mandato de UNICEF “es transversal, todas las agencias especializadas de Naciones Unidas trabajando con los ODS, de una forma u otra, trabajan con los niños” y apostilló que la organización “tiene una peculiaridad dentro del sistema de Naciones Unidas, que no tiene otra agencia, y es que tiene 33 comités nacionales, lo que le da una mayor fortaleza”, valorando su “gran capacidad para traducir sus programas complejos para un público global”.
Al hilo del diálogo, y sobre los problemas que sufren los menores, el director del Instituto de Estudios de Naciones Unidas no quiso pasar por alto el hecho de que “en estos momentos, la obesidad es un problema casi tan grave como el hambre”, agregando que el año pasado “había más de 340 millones de adolescentes con sobrepeso u obesidad”.
Gustavo finalizó su exposición señalando que, “a nivel global, tenemos un grave peligro con la pandemia, puede ser utilizado como excusa para no cumplir los ODS” y pidió “que no se utilice el COVID como excusa para no cumplir los importantes retos que tenemos”.
Como viene siendo habitual, José María López, director de RSC de Unicaja Banco, se incorporó al final del encuentro, indicando que “es significativo que las grandes organizaciones internacionales tengan 75 años después tanta importancia en la sociedad” y resaltando la importancia de algunos de los temas tratados durante la jornada, como la malnutrición, la obesidad o los niños invisibles, entre otros.
Finalmente, Manuel Bellido concluyó el acto avanzando un nuevo encuentro en las próximas semanas y ensalzando la labor de OECA como punto de encuentro. “Sean sostenibles”, finalizó.