El sector aeroespacial se ha convertido en uno de los motores del tejido industrial de Andalucía y España, y uno de los sectores con mayor potencial de futuro. En la última década, nuestra Comunidad ha logrado un crecimiento exponencial, y su facturación ha pasado de 495 millones, en2001, amás de 1.750 millones, en 2011. De este crecimiento ha participado tanto la industria tractora como la auxiliar, y la progresión ha sido no sólo cuantitativa sino también cualitativa, de modo que el aumento del volumen de negocio ha ido acompañado de la mejora en otros importantes indicadores, como la productividad, mayor inversión en I+D, la orientación progresiva hacia las actividades de mayor valor añadido y una creciente diversificación de los mercados.

Esta evolución de la industria aeroespacial andaluza viene unida indiscutiblemente a la llegada de nuevos proyectos internacionales de gran envergadura, como el ensamblaje del Airbus A400M, pero fundamentalmente viene unida al dinamismo de los empresarios, verdaderos responsables de este crecimiento, y a la orientación de las políticas públicas diseñadas para impulsar el sector. Estas políticas han permitido la entrada en escena de diversos agentes que están contribuyendo a esa mejora de la industria aeroespacial, y entre los que se incluye Aerópolis, el Parque Tecnológico Aerospacial de Andalucía.
Nacido a finales de 2003, Aerópolis se ha convertido en uno de los principales impulsores de la industria auxiliar andaluza y un espacio de referencia para los negocios aerospaciales en el sur de Europa. Su mayor valor diferencial consiste en poner a disposición de las empresas una serie de infraestructuras y servicios avanzados que contribuyen de manera destacada a su crecimiento y al desarrollo de nuevas actividades de negocio, y todo ello por la vía de la innovación, la incorporación de nuevas tecnologías y la diversificación hacia los negocios de mayor valor añadido y menos deslocalizables por estar más vinculados a la aportación de ingeniería, diseño y conocimiento.
La experiencia suele acreditar que los Parques Científicos-Tecnológicos favorecen un crecimiento empresarial más sostenible y sostenido. Esta experiencia general ha encontrado en Aerópolis una nueva validación, y muy señalada además por la importancia que la industria aerospacial tiene ya en Andalucía y España (y puede tener mucho más en el futuro) como sector estratégico dentro de un nuevo modelo productivo más orientado hacia el conocimiento y las actividades de mayor valor.
En Aerópolis las empresas crecen más y crecen en áreas más valiosas, en primer lugar, porque están en un entorno competitivo, con excelentes comunicaciones, junto ala FAL(la línea de ensamblaje final) del A400M, donde conviven la empresa tractora Airbus Military, los “tier one”, proveedores de primer nivel, y la industria auxiliar, y donde la excelencia y el interés por mejorar está, por así decirlo, en el ambiente, o, dicho de otra forma, donde todas las firmas que están, están porque comparten el objetivo de crecer de una determinada manera, más innovadora y tecnológica, con más ingeniería, saliendo más a los mercados internacionales, y diversificando servicios y clientes. En segundo lugar, porque en Aerópolis encuentran además un apoyo concreto a la inversión I+D+i e infraestructuras tecnológicas de primer orden, como el Centro Avanzado de Tecnologías Aeroespaciales (CATEC), que es el mejor aliado posible para el diseño e incorporación de nuevas soluciones tecnológicas, y al que acuden ya no sólo empresas andaluzas, sino de toda España, y aun de fuera de España, en búsqueda de su conocimiento y experiencia, pionera en campos como la robótica o los sistemas no tripulados. Y finalmente, porque en Aerópolis encuentran un conjunto de servicios que permiten que las empresas realicen su actividad con más y mejores posibilidades de éxito que implican mejoras a su productividad, formación e información y que favorecen el desarrollo profesional de los trabajadores, así como facilitan también la conciliación de su vida personal y laboral.
Es quizás por todo esto, y de nuevo quiero volver a hacer hincapié en la altura de miras de tejido empresarial aeronáutico andaluz, que Andalucía tiene visos de seguir creciendo este año y en los próximos tanto como lo ha hecho su industria auxiliar en los últimos ejercicios. Sintámonos orgullosos de este sector, de sus empresas, sus profesionales y empresarios y que esto nos de ánimo para trabajar más en una coyuntura que tan falta está de optimismo.
Joaquín Rodríguez Grau
Gerente de Aerópolis, Parque Tecnológico Aeroespacial de Andalucía