Entrevista a Carlos García, responsable técnico sector Edificación y Obra Civil de Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA)

 

Agenda de la Empresa: ¿En qué momento se encuentra la minería en Andalucía?

Carlos García: El sector minero andaluz se encuentra en un momento clave en el que se dan cita tanto claras oportunidades de negocio y desarrollo económico como importantes desafíos a la hora de gestionar los pasivos ambientales. En definitiva, se trata de llegar al despliegue efectivo del concepto de minería circular, que garantice la sostenibilidad económica, social y ambiental del sector. El contexto internacional, con un repunte para nada coyuntural del precio de las materias primas en los mercados y con el cobre cotizando a casi 6.000 dólares por tonelada, es claramente favorable al incremento de la producción y a la apertura de nuevos yacimientos. La Faja Pirítica Ibérica, ubicada en su mayor parte en Andalucía y con una privilegiada situación geoestratégica, vuelve a ser, sin duda alguna, un territorio de clara oportunidad. Por otro lado, se calcula que los actuales vertidos diarios al Océano Atlántico de aguas ácidas de mina superan los producidos en la rotura de la balsa de Aznalcóllar, por lo que apremia la necesidad de desarrollar tecnologías que permitan aprovechar el potencial de los recursos minerales de la región de manera racional, eficiente, diversificada y dentro de las pautas señaladas por el desarrollo sostenible. Este contexto de riesgo y oportunidad queda, de hecho, muy bien reflejado en las principales directrices de la Estrategia Minera de Andalucía 2014-2020 donde, entre otras cosas, se urge a un mayor esfuerzo en innovación por parte del sector.

CTA2A.E.: ¿Qué oportunidades plantea la innovación a este sector?

C.G.: Las mayores oportunidades de innovación en el sector se sitúan en el ámbito de la minería circular. La economía circular propone un nuevo modelo de sociedad que utiliza y optimiza los stocks y los flujos de materiales, energía y residuos y su objetivo es la eficiencia del uso de los recursos. En el caso de la minería, se requiere de desarrollos en varias líneas complementarias entre sí, relacionadas básicamente con la mejora de la productividad y seguridad en las operaciones de laboreo y sus infraestructuras -incluyendo la puesta en valor de colas de mina y escombreras y el aprovechamiento de metales en bajas concentraciones- y, al mismo tiempo, la minimización del impacto medioambiental, preferentemente a través de tecnologías de vertido cero que, a su vez, permitan la recuperación de metales valiosos.

A.E.: ¿En qué áreas puede aportar más innovación y tecnología el tejido productivo y científico andaluz?

C.G.: La mayor parte de las tecnologías y equipamientos de laboreo proceden actualmente de terceros países, en particular de Escandinavia, Australia y Canadá. Existe, sin embargo, una clara oportunidad en tecnologías avanzadas para la prospección y exploración de yacimientos, minimización y control de vertidos, control de operaciones e infraestructuras seguras de contención, confinamiento y almacenamiento de residuos. Igualmente, vuelven a surgir oportunidades para las tecnologías de tratamiento y concentración de menas y de aprovechamiento de gangas. En todas estas líneas existen capacidades destacadas en Andalucía.

A.E.: ¿Se están apoyando desde CTA proyectos relacionados con este sector?

C.G.: Efectivamente, CTA ha financiado varios proyectos relacionados con tecnologías de depuración de vertidos, desarrollo de infraestructuras resistentes a la corrosión, procedimientos electroquímicos avanzados de recuperación de metales y aprovechamiento de subproductos y equipamiento de última generación para la metalurgia del cobre.

A.E.: ¿Qué programas europeos existen de apoyo al sector?

C.G.: La Comisión Europea ha retomado con impulso decidido el fomento y apoyo al sector, siempre bajo el paraguas de la sostenibilidad y la innovación, bajo diversas iniciativas como la de fomento de la economía circular y la de materias primas, así como mediante la Asociación Europea para la Innovación y la Comunidad Europea de Innovación sobre materias primas. De ellas, se desprenden diversos compromisos y programas de financiación, especialmente a través de Horizonte 2020 y su línea temática sobre medioambiente y materias primas. En este último caso, destaca la Red Europea ERAMIN de Entidades Financiadoras de proyectos transnacionales de I+D+i en minería, que tiene en este momento convocatoria abierta, y cuyas condiciones financieras son muy similares a las de los proyectos Innterconecta del CDTI.

A.E.: ¿Qué perfiles de empresas pueden beneficiarse del despegue del sector en Andalucía?

C.G.: Como antes comentaba, existe un notable nicho de oportunidad para proveedores de tecnologías de prospección, exploración, tratamientos avanzados del mineral, construcción especializada y control medioambiental.

 

BIO
Carlos García es responsable del sector de Edificación y Obra Civil en CTA. Ingeniero de formación y tecnólogo de vocación, ha dedicado la mayor parte de su trayectoria profesional de más de 25 años a la planificación, gestión, ejecución y puesta en valor de resultados de programas y proyectos de I+D+i nacionales e internacionales en los sectores energético, medioambiental y de la construcción, fuertemente interrelacionados, tanto desde el sector público como el privado. Ha participado activamente además en la gestación y desarrollo de la mayoría de las principales iniciativas y plataformas tecnológicas en dichos ámbitos.

 

Inma Sánchez