Iberdrola registró un beneficio neto de 2.416,6 millones de euros entre enero y septiembre, lo que supone un incremento del 18,4% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, gracias a la diversificación del negocio internacional que compensa los malos resultados en España, cuya producción hidroeléctrica ha sido un 57,6% inferior a la de 2016.

Concretamente, Iberdrola ha acometido inversiones por valor de 3.997,1 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, lo que supone un incremento del 31,5% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. De esta cantidad, un 91% se ha destinado a proyectos de redes, renovables y generación con contratos a largo plazo, de acuerdo con la estrategia del grupo de centrar su actividad y retornos futuros en negocios estables y regulados.

En paralelo, Iberdrola ha contratado a 2.559 profesionales, con lo que su equipo supera ya las 34.000 personas al cierre de septiembre. Asimismo, el grupo ha realizado compras a más de 20.000 proveedores en todo el mundo por un importe superior a los 6.300 millones de euros y las ventas se han situado en 22.284,7 millones de euros, un 3,5% más, con un aumento del margen bruto del 0,2%, hasta los 9.760,4 millones de euros. El flujo de caja operativo ha ascendido a 4.625,6 millones de euros, un 1,9% menos.

Los buenos resultados son consecuencia del positivo comportamiento de los negocios de redes y generación con contratos a largo plazo, así como de la diversificación internacional de la empresa, siendo clave la aportación de las filiales AVANGRID, en Estados Unidos, y Neoenergia, en Brasil. Así, AVANGRID ha aumentado su beneficio neto en un 14%, hasta los 494 millones de dólares, y su rentabilidad total al accionista (RTA) en el año supera el 38%; mientras que Neoenergia, la filial brasileña ha supuesto una plusvalía de 521 millones de euros para Iberdrola, resultado de la puesta a valor de mercado de la participación que la compañía tenía anteriormente en Neoenergia y que ahora asciende al 52,45%.

El beneficio bruto de explotación (Ebitda) se ha situado en 5.440 millones de euros, un 5,1% menos que en los nueve primeros meses de 2016.

Además, el Consejo de Administración de Iberdrola ha aprobado la ejecución de una nueva edición del programa Iberdrola Dividendo Flexible, para lo que sería el dividendo a cuenta de los resultados de 2017 y que se abonará en enero de 2018. Esta nueva edición introduce una novedad: la posibilidad de recibir el dividendo en efectivo.