La compañía resultante, para la que ya se barajan varios nombres, será un operador de referencia en ingeniería, tecnología autónoma y robótica colaborativa

Inypsa y Carbures han anunciado su intención de fusionarse tras el acuerdo al que han llegado los accionistas de control de ambas sociedades. La fusión será paritaria, con un reparto accionarial a partes iguales para cada empresa, y ahora se inician los respectivos procesos de due diligence en ambas sociedades, ordinarios en este tipo de operación.

Los accionistas de control de Inypsa, Ladislao Azcona, expresidente de Tecnocom, y Leonardo Sánchez Heredero, ex vicepresidente de Tecnocom, se comprometen a impulsar esta operación en el Consejo y Junta de accionistas de Inypsa, e incluso a financiar a Carbures, mediante una línea de liquidez financiera de 10 millones de euros, para poder abordar operaciones y proyectos de manera inmediata sin necesidad de esperar a que la fusión esté completada.

En el marco de este proceso, Inypsa realizará una ampliación de capital por 15 millones de euros, cuya cobertura está garantizada en su integridad por sus accionistas firmantes del acuerdo. El accionista de Inypsa Grupo Melca, que no es firmante del acuerdo, se compromete también a asistir a la ampliación de capital.

Por su parte, los accionistas de referencia de Carbures, Black Toro Capital; su presidente y fundador, Rafael Contreras, que será el presidente de la resultante; y el accionista José María Vallejo, que suman un 56,39% de la compañía, se han comprometido a impulsar la operación en el seno del Consejo de Administración y en la Junta General de Carbures. Ambos grupos de socios, con su compromiso irrevocable de votar a favor de la integración, garantizan el éxito de la operación.

Contreras afirma que la operación “supondrá la oportunidad de ampliar mercados, una mayor producción industrial de nuestras piezas y estructuras y acceso a nuevos inversores”. “La nueva estructura de la organización nos va a permitir optimizar a la compañía como resultado de nuestro buen posicionamiento mundial con el objetivo de seguir creciendo en nuestras respectivas líneas de actividad”, añade Contreras.

Para el presidente de Inypsa, Juan Lazcano, se trata de “una operación con enorme potencial que permite impulsar el cambio estratégico y un mayor y muy ambicioso desarrollo de la empresa”.

El proceso de integración de ambas tendrá una duración aproximada de seis meses. Una vez concluya ese proceso, la compañía resultante será un grupo tecnológico industrial con una valoración bursátil superior a los 200 millones de euros. La fusión se realiza con el objetivo de seguir impulsando el crecimiento de la compañía resultante por lo que no se prevén cambios en las respectivas plantillas y se mantiene la operativa ordinaria de sus plantas y proyectos. La empresa resultante tendrá proyectos en desarrollo en más de un centenar de países de todo el mundo y trece plantas tecnológico-industriales.

Las dos compañías tienen voluntad de completar la integración “en el periodo más breve posible y anunciar la creación de una comisión de integración y coordinación industrial que comenzase a trabajar de manera inmediata”.