Comisiones Obreras ha defendido siempre ante las instituciones y ante los distintos gobiernos -tanto central como autonómico- un modelo de salud cuyo anclaje fundamental y elemento vertebrador sea la Atención Primaria y hemos rechazado -con denuncias y movilizaciones- los distintos recortes que, de manera directa o indirecta, se han aplicado a este pilar fundamental del sistema sanitario público.
En Andalucía, la puesta en marcha del nuevo modelo sanitario, surgido fundamentalmente de la reforma de la Atención Primaria de Salud de 1984 y la promulgación de la Ley General de Sanidad de 1986, coincidió con la implantación y desarrollo de la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria. Ello contribuyó decisivamente al rápido desarrollo del nuevo modelo, que fue acogido por miles de trabajadoras y trabajadores de la Salud, determinantes para tejer una red asistencial que fortalecía el sistema público, resolviendo el 90 por ciento de los problemas de salud y convirtiendo la Atención Primaria en un instrumento fundamental y eficaz de cohesión social y corrección de desigualdades en una tierra como la nuestra, con gran diversidad y dispersión territorial. Actualmente, el auge de la tecnología médica, junto al crecimiento de las grandes áreas hospitalarias, ha marginado una visión más global de las personas enfermas y de su contexto social y familiar, así como de los aspectos comunitarios y preventivos.
En este contexto, CCOO-A ha denunciado que la insuficiente financiación per cápita de nuestra comunidad autónoma ha sido, junto al carrusel de recortes de derechos y de inversión efectuados por los distintos gobiernos a partir de la crisis económica de 2008, la combinación fatal que ha provocado un daño devastador en nuestro Estado de Bienestar, y lo que es peor, la confianza de la clase trabajadora en el presente y en el futuro. En nuestro sistema público de salud, los efectos de los recortes los hemos sufrido en unas plantillas infradotadas y en el empeoramiento de sus condiciones laborales, en la parálisis de las inversiones necesarias en infraestructuras y en la anteposición de criterios de abaratamiento económico en lugar de criterios más rigurosos con el compromiso de mantenimiento de la calidad del servicio. Estas políticas han resultado especialmente dañinas en la Atención Primaria, un nivel asistencial que ya venía padeciendo años de olvido y dejadez por parte de los responsables políticos.
CCOO-A, a través de nuestra Federación de Sanidad, ha desarrollado el documento ‘Propuestas para impulsar la Atención Primaria en Andalucía’, que propone 150 acciones que pretenden, junto con las aportaciones que otras organizaciones sociales, sociedades científicas y asociaciones profesionales puedan realizar, ayudar a resolver el conflicto en el que está estancada nuestra Atención Primaria. Asimismo, es necesario reconocer el enorme esfuerzo que ha realizado el conjunto del personal, pues gracias a su trabajo y compromiso con la sanidad pública, se ha sustentado la atención sanitaria y se ha impedido que el sistema se vea aún más erosionado en su prestación y calidad.
Llamamos al nuevo Gobierno andaluz al diálogo con los representantes legales de las trabajadoras y trabajadores de la Salud y le pedimos compromiso y agilidad. Es preciso alcanzar urgentemente soluciones consensuadas que resuelvan los problemas de todas las categorías profesionales que trabajan en nuestros centros de salud. Si bien reconocemos que gran parte de la soluciones corresponden al Estado, ello no es óbice para que el Gobierno autonómico tome la iniciativa y evite que los conflictos devengan en movilización creciente, la cual contará, sin duda, con la solidaridad, el compromiso y la capacidad de lucha que siempre ha caracterizado a las trabajadoras y trabajadores del Sistema Sanitario Público de Andalucía.
Nuria López 
Secretaria General de CCOO-A
@nurialomar
