El Palacio de las Dueñas es una de las visitas culturales que los pequeños de Sevilla hacen con el colegio. En una de sus viviendas nació Antonio Machado, un gran poeta y miembro de la generación del 98. Cuando llegué a casa compartí con mi hija un momento para conocer qué es lo que más le había gustado y conocer su experiencia. Aproveché ese momento para rescatar uno de los poemas que escribió cuando estaba por mi tierra en su obra Campos de Castilla y lo leímos juntos. Comienza así: “Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino…”.

¿Qué te parece? ¿Qué nos quiere decir Machado? Pregunté en voz alta. Después de unos segundos de silencio me contestó lo que pensaba y lo comentamos juntos. Entre otros significados, me quedo con uno de ellos: viajar y andar el camino, es decir, actuar y vivir la experiencia. Mirar hacia atrás permite ver una senda que nos ayude a mejorar, y cuando se es pequeño y comenzamos a andar, una buena compañía que nos oriente y acompañe es de gran valor para los años venideros.

Pues bien, llevamos tres meses de camino recorrido del ejercicio 2019 en la gestión de patrimonios y disponemos de datos, datos que nos muestran cómo tomamos decisiones de inversión. Hace unos días conocíamos la noticia de la suscripción o contratación de más de 1.000 millones de euros en productos de inversión con una rentabilidad no garantizada y permanencia de cinco años para personas con perfil conservador. Son los llamados fondos de inversión de rentabilidad objetivo, es decir, sin garantizar la totalidad del capital invertido se busca generar una rentabilidad máxima. Es un viaje que tiene riesgos, entre ellos, perder una parte del capital. Pero hay más: si la rentabilidad máxima que se puede conseguir es del 0,55% anualizado, puedo pensar que al menos no pierdo y genera algo. Sin embargo, si hay una inflación del 1,2%, es decir, más del doble, pierdo riqueza o poder adquisitivo. Consciente o inconscientemente es una realidad. Un viaje que han emprendido ciertas personas por un camino. Han actuado, han tomado una decisión.

Otros, sin embargo, no han actuado o lo han hecho de una manera diferente. Parafraseando a Machado, “… se hace camino al andar”, es posible, antes de empezar a caminar, pensar hacia dónde vamos y cómo lo podemos acometer. Es sencillo, es cuestión de planificarlo y actuar. En el camino nos encontraremos con dificultades o momentos en los que tendremos que estar tranquilos y seguros con nuestra hoja de ruta y, en ocasiones, aprovechar el momento, como lo están haciendo los profesionales de la gestión de patrimonios. Son conocedores del comportamiento del mercado y del comportamiento de los inversores, tienen una estrategia clara y definida y actúan con firmeza. Aprovechan la oportunidad que les brindan otros, es decir, adquieren activos financieros que otros no quieren y se produce un trasvase de riqueza de los impacientes a los pacientes (como diría Warren Buffet).

La incertidumbre de emprender un camino se reduce con una Planificación Financiera y un acompañamiento que trabajen por tus objetivos y necesidades. Una mayor Educación Financiera permite dejar la emoción a un lado y hablar de ti, de tu presente y tu futuro. Un profesional que te escuche puede hacerte dejar tus huellas en tu camino y un recuerdo enriquecedor a los tuyos cuando recuerdes las estelas en la mar.

Ve bien acompañado y disfruta pues “Caminante, no hay camino, se hace camino al andar”.

 

Juan Francisco Martín Báñez WEB Juan Francisco Martín Báñez

EFA European

Financial Advisor

Asociado EFPA 12099

 

Artículo incluido en el número de marzo de la revista Agenda de la Empresa