Los primeros meses de 2019 se dan varias citas en las que la clase trabajadora y el conjunto de la ciudadanía nos jugamos mucho en ellas. Citas de profunda trascendencia que marcarán el modelo de sociedad del próximo periodo.

La primera, el pasado 8 de marzo, un día histórico un año más, en el que se ha mostrado la fortaleza del discurso por la igualdad con miles de personas sacudiendo las calles, secundando la huelga, y demandando acciones especialmente en los casi 1.000 comités de empresa y juntas de personal, así como en las más de 400 secciones sindicales de CCOO.

Sin duda, este éxito debería marcar las elecciones generales del próximo 28 de abril. Y digo esto porque el mensaje ha sido claro para el gobierno que resulte: no vamos a permitir dar ni un paso atrás en nuestra lucha por la igualdad porque es un camino sin retorno. Es más, deben entender el mensaje con más altura de miras porque queremos un modelo de sociedad con más justicia social disminuyendo la desigualdad creciente, la pobreza laboral y social, las brechas de género y el racismo y la xenofobia, entre otras cuestiones. Además, ese mismo día, el 28 de abril también es fecha clave para el sindicalismo mundial. El Día Internacional de la Seguridad y Salud en el Trabajo debe servir para que el gobierno saliente se comprometa a establecer un marco laboral que apueste por la mejora de las condiciones laborales y que anteponga la salud de las personas sobre otros intereses. Para ello, es fundamental derogar la reforma laboral para recuperar los equilibrios en la negociación colectiva para, de un lado, evitar que en algunas empresas se den incumplimientos cuyas consecuencias más dramáticas encontramos en unos índices intolerables de siniestralidad en Andalucía y, de otro, afrontar los cambios derivados de la Revolución Digital.

Siguiendo el calendario, tenemos el 1º de Mayo. El mensaje de la sociedad también es claro para el empresariado: demandamos empresas con un compromiso fuerte por la igualdad, por la seguridad y la salud, por la recuperación de salarios y por unas condiciones laborales de calidad.

Es fundamental acometer un trabajo conjunto con la representación legal de las personas trabajadoras, porque estamos mandatados a negociar planes de igualdad en las empresas de más de 50 personas trabajadoras; también tenemos que negociar, antes del 12 de mayo, la forma del registro horario obligatorio diario de jornada en las empresas; exigir el cumplimiento de la nueva Estrategia Andaluza de Seguridad y Salud Laboral; el impulso del Plan Andaluz de Apoyo a la Negociación Colectiva para que todos esos convenios que están desactualizados o bloqueados se modernicen y seamos referentes a nivel estatal; y debemos de cumplir lo que pactamos, especialmente lo incluido en el IV Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva referente al Salario Mínimo Garantizado por Convenio Colectivo de 14.000 euros, algo de suma urgencia porque el salario medio anual en Andalucía es un 21,2% inferior al resto de España, máxime en Huelva y Jaén, cuyo diferencial se amplía al 30%.

Por último, esta primera mitad del año 2019 tiene una cita de gran calado el próximo 26 de mayo. Las elecciones al Parlamento Europeo y a los gobiernos locales tienen unas implicaciones que marcarán qué Unión Europea tendremos en el futuro y qué políticas regirán nuestros ayuntamientos.

Es fundamental articular unos servicios públicos locales suficientes y de calidad, servicios sociales que protejan a aquellas personas con una situación social y económica más desfavorecida, garantía del derecho a una vivienda digna y políticas dirigidas a reforzar la cohesión social.

De lo que resulte de la ecuación final de todas estas citas dependerá una parte importante del futuro de nuestra sociedad.

 

Nuria López Web Nuria López

Secretaria General de CCOO-A

@nurialomar

 

Artículo incluido en el número de abril de la revista Agenda de la Empresa