La entidad sigue reforzando su liderazgo comercial en banca de particulares y en banca digital, con una cuota de penetración en España del 29,3% y del 32%, respectivamente

El Grupo CaixaBank obtuvo en el primer trimestre de 2019 un beneficio atribuido de 533 millones, un 24,3% menos que en el mismo periodo de 2018. “El descenso del resultado en el trimestre se debe esencialmente a la reducción de los resultados de entidades valoradas por el método de la participación, como consecuencia de la no atribución de los resultados de Repsol tras el acuerdo de venta (63 millones) y de BFA tras reestimación de la influencia significativa y reclasificación contable (76 millones), así como por los menores resultados extraordinarios por activos y pasivos financieros y otros en 2019, principalmente por la revalorización de la participación de BPI en Viacer en 2018 (54 millones)”, han explicado desde la compañía. Sin tener en cuenta estos impactos extraordinarios de 193 millones, el beneficio se hubiese incrementado un 4,3% (resultado neto atribuido ajustado de 511 millones en el primer trimestre de 2018).

La contribución a resultados del negocio bancario y asegurador asciende a 415 millones con una rentabilidad (ROTE), excluyendo aspectos singulares, del 9,9%. La aportación del negocio de participaciones alcanza los 60 millones y la de BPI los 58 millones.

Por otro lado, el beneficio se apoya en el crecimiento de los ingresos core del negocio, que alcanzan los 2.027 millones (+0,9%), apoyados por un aumento del margen de intereses del 2,9%, hasta los 1.237 millones, y a pesar del descenso de las comisiones del 2,2%, hasta los 612 millones.

Los gastos de administración y amortización recurrentes crecen un 4,7%, en cuyo aumento inciden mayores gastos por la aceleración del plan de transformación de la red (oficinas Store, InTouch), un mayor gasto en tecnología y en nuevas iniciativas comerciales, y nuevos requerimientos normativos. En relación con el trimestre anterior, incide el registro de 7 millones correspondiente al IBI de inmuebles de uso propio.

Los recursos de clientes crecen en 10.981 millones, hasta los 369.463 millones, un 3,1% más a cierre del primer trimestre, apoyados en la buena evolución de la actividad comercial y la recuperación de los mercados en este periodo.

Los recursos en balance alcanzan los 266.674 millones (+2,8% en 2019), con un crecimiento del 3,3% del ahorro a la vista, hasta los 180.033 millones. Por su parte, el aumento del 1,8% del ahorro a plazo se ve impulsado, esencialmente, por la emisión de una nota minorista por 950 millones.

La entidad sigue reforzando su liderazgo comercial en banca de particulares y en banca digital, con una cuota de penetración en España del 29,3% y del 32%, respectivamente. Además, la entidad sigue reforzando su liderazgo en banca digital con la mayor base de clientes digitales en España: 6,1 millones de los cuales 5,4 millones son también clientes en banca móvil.

Finalmente, la ratio de morosidad del Grupo se reduce hasta el 4,6% (-13 puntos básicos en el trimestre). Los saldos dudosos descienden 212 millones tras la gestión activa de la morosidad, y se sitúan en 10.983 millones (-2.712 millones de euros en los doce últimos meses que, además de la gestión de la cartera dudosa y la normalización de los indicadores de calidad de activo, incluían ventas de carteras). La ratio de cobertura se mantiene estable en el trimestre en el 54%.