Talento e innovación son dos términos relacionados de manera indisoluble. La I+D+i necesita y genera talento y, al mismo tiempo, lo atrae y lo retiene en los entornos innovadores. Sin duda, Andalucía es una tierra de talento en muchos aspectos, pero también lo es en cuanto a capacidades tecnológicas y comienza a ser urgente que lo aprovechemos mejor para garantizar la competitividad de la economía andaluza frente al mercado global.
La innovación y el talento se retroalimentan. Como ejemplo, desde CTA hemos elaborado este año un estudio para el Ayuntamiento de Sevilla y Sevilla Futura sobre Empresas de Base Tecnológica (EBT) de la ciudad que demuestra, con cifras, cómo este tipo de empresas de perfil innovador tiene una intensidad en capital humano cualificado mucho más alta que la media de empresas y que contribuyen, además, a la atracción y fijación de capital y talento extranjero al territorio muy por encima de otro tipo de empresas.
Dicho estudio indica que las EBT sevillanas generaron empleo a un ritmo significativo durante una década en la que se sufrió una profunda crisis económica que destruyó numerosos puestos de trabajo. Se confirma así, por lo tanto, la fortaleza de este tipo de empresas y su contribución a una economía más sólida.
En el caso de las EBT sevillanas, según la encuesta realizada por CTA, el 52% de ellas tienen una plantilla compuesta en más de un 75% por titulados universitarios y llama la atención que el 32% de ellas cuentan con doctores entre sus empleados, un alto nivel de cualificación propio de entidades intensivas en conocimiento.
Por lo tanto, es evidente que la actividad innovadora y basada en la aplicación de nuevas tecnologías necesita del talento, pero también lo atrae, lo retiene y lo fija al territorio.
En Andalucía, disponemos tanto de capital humano cualificado y conocimiento generado en unas universidades públicas con prestigio en determinadas especialidades y tecnologías, como con emprendedores, empresarios y empresas con mucho talento. Tenemos que promocionar mejor todas esas capacidades ante el resto del mundo para atraer más inversiones a la región.
Además, es imprescindible mantener una apuesta sólida por la innovación tecnológica, que es, al mismo tiempo, un imán que atrae y retiene el talento y un motor generador de nuevo talento, capacidades y competitividad. Empresas, Administración y agentes intermediarios tenemos la responsabilidad de acelerar el esfuerzo en I+D+i de Andalucía para garantizar una economía competitiva y generadora de riqueza.
Tenemos que elevar la intensidad en I+D de la región, que se encuentra por debajo del 1% en la actualidad, para acercarnos al objetivo europeo del 3%. Solo así mantendremos nuestra capacidad para competir. Desde CTA, ofrecemos nuestro programa de incentivos, nuestros servicios especializados de apoyo a la innovación y nuestro expertise para avanzar en esta dirección.
Andalucía tiene una posición estratégica excelente que permite abordar el mercado emergente de África, el mercado latinoamericano y el europeo. Por otra parte, gracias a sus universidades públicas, es un entorno de conocimiento altamente aplicable por las empresas, especialmente multinacionales, que cada vez necesitan más estar rodeadas de un entorno que les permitan incorporar nuevas tecnologías y tendencias.
Por último, la atomización del tejido productivo andaluz es un aspecto que tradicionalmente se ha considerado un punto débil a mejorar, pero también es una fortaleza como atractivo en el caso de las pequeñas empresas tecnológicas muy especializadas capaces de generar conocimiento. Las grandes empresas se nutren cada vez más, a través de alianzas estratégicas, de la colaboración con micropymes tecnológicas, que son más ágiles para detectar e incorporar las tendencias y nuevas tecnologías disruptivas. Andalucía tiene una gran fortaleza en este perfil y el hecho de que las grandes empresas internacionales lo aprovechen ayudará también a las empresas locales a ganar dimensión.
CTA lleva 14 años promoviendo la cultura de la innovación en el tejido empresarial andaluz y ayudando a las empresas a desarrollar una estrategia de innovación abierta bien alineada con los objetivos generales de su negocio para que sigan siendo competitivas y generando riqueza y empleo. Nuestro interés es seguir siendo un aliado estratégico en el aprovechamiento del talento para innovar.
Elías Atienza 
Director General
Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA)
