Recuerda que la distribución “no es el agente más importante” dentro de la cadena

Por su parte, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), confirma su compromiso a colaborar con el Ministerio de Agricultura y el resto de eslabones que componen la cadena de valor, “en la búsqueda de soluciones que ayuden a mejorar la situación del sector agroalimentario y la producción española”.

“Dada la complejidad del debate, creemos que es importante situar bien el papel que pueda jugar la distribución comercial, como uno de los principales clientes del sector primario, pero no el único ni más importante en el caso de muchas producciones”, señalan.

Según datos del Ministerio de Agricultura, el 52% de la producción agraria española se destina directamente a la exportación. El resto de la producción agrícola se destina casi a partes iguales a la industria transformadora y el comercio interior, sin olvidar el peso de la restauración y bares (consumen en torno a un 10%). En el caso de frutas, verduras y hortalizas, un 9% de la producción total se vende a través del comercio tradicional y los mercas y un 11% restante a través de supermercados e hiper.

“Es decir, las soluciones a los problemas estructurales del campo en España requieren el compromiso de muchos actores y en ese sentido es positivo que el Ministerio de Agricultura haya abierta una vía de diálogo con todos ellos”, apuntan.

Además, recuerdan que las grandes empresas de distribución son “las primeras interesadas en ayudar al campo español para que mejore su dimensión empresarial y pueda orientar su producción a las nuevas tendencias del consumidor nacional e internacional. Es importante buscar soluciones de futuro, que permitan a los agricultores a ser más competitivos, aprovechar economías de escala y ofrecer a sus clientes de la mayor estabilidad”.

Coincide también la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados, Asedas, ante las protestas:”compartimos su preocupación y estamos dispuestos a dialogar”.

Han recordado asimismo que la distribución “no es el agente más importante” dentro de la cadena, apuntando que “los precios que perciben los agricultores están sometidos a una gran volatilidad derivada de innumerables factores”.