El hablar de estrategia en el área de Recursos Humanos, soy de las que cuido de que la persona esté en el centro de la misma. A veces, la complejidad de la gestión en la propia área dificulta el objetivo estratégico. Para que las personas ligadas a la estructura del departamento puedan aportar valor y dedicar tiempo a lo importante hay que dejar entrada a la tecnología, facilitando el camino a la transformación digital que acompaña a las áreas de Recursos Humanos.

Con esto no hago referencia a los posibles algoritmos que sustituyen a personas, por ejemplo, haciendo las entrevistas finales en procesos selectivos, sino poner la tecnología al servicio del departamento, buscando una forma más eficiente de trabajar, la forma más humana de gestionar a sus empleados y la mayor ventaja competitiva para la empresa.

Hoy haré referencia a algunas de estas tendencias tecnológicas que facilitan la tarea en los departamentos de RR. HH.:

Inteligencia Artificial (IA) para elegir candidatos. Sabéis que el uso de las herramientas multiposting permiten publicar ofertas de empleo y gestionar perfiles en múltiples webs de empleo y redes sociales. Esas tareas se vuelven muy complejas y carentes de valor.

La IA nos ayuda a ahorrar tiempo y recursos de la empresa ya que el diseño de un buen algoritmo, a la petición de “busco técnico comercial de smartphone con tres años de experiencia para grandes cuentas”, es capaz de ofrecer respuestas de calidad con búsquedas en diferentes bases de datos y webs de empleo. Además, si aplicamos el sistema de Machine Learning, esta tecnología puede anticipar necesidades futuras de reclutamiento sin que tenga que contar con información previa. Claramente facilita los tiempos en los procesos.

Chatbots para resolver dudas. Los chatbots son esos programas que permiten mantener conversaciones con respuestas automáticas y preestablecidas para los usuarios, y que van aprendiendo a medida que los usamos. Están presentes en los departamentos de atención al cliente y en los contact centers de muchas empresas. Como ejemplos tenemos los sistemas de Siri o Alexa; ubicados en las empresas, estos chatbots activados por voz podrán responder a las repetidas preguntas de los trabajadores.

Gestión del desempeño en tiempo real. Con un buen software, el empleado puede obtener feedback de cómo es su desempeño facilitando la evaluación continua y evitando reuniones de seguimiento que no siempre son eficaces. De esta manera, los mandos intermedios podrán orientar su tiempo de calidad a conversar con cualidad y calidad sobre el desarrollo profesional y personal de sus equipos, generando mayor compromiso y, por ello, mejor productividad.

Biometría para el control de asistencia. Los relojes biométricos podrán utilizar marcadores biológicos para identificar a los empleados, minimizando el riesgo de absentismo injustificado. Entre los métodos de seguimiento biométrico del tiempo se incluyen el escaneo de huellas dactilares y el reconocimiento facial o del iris. Después de la obligatoriedad del control horario el pasado año, muchas empresas ya lo utilizan.

Wearables para reducir el estrés. Los dispositivos portátiles, como smartphones o wearables, también se utilizarán cada vez más para controlar la salud en el lugar de trabajo, algo que podría tener un gran impacto en ambientes de mucha presión y alto estrés. Estos sistemas rastrean la frecuencia cardíaca, la temperatura corporal y la dilatación de la pupila, entre otros factores, lo que proporciona información sobre los factores estresantes o dolores de los empleados y permite a los gestores cambiar los procesos para evitar estos problemas.

Toda esta tecnología bien usada está orientada a hacer que verdaderamente la persona esté en el centro de la estrategia. Abre la puerta del área a la tecnología, podrás centrarte en lo verdaderamente importante, el negocio y las personas.

 

Ana Herrero WEB Ana Herrero

Directora en Andalucía de Montaner & Asociados

@AnaHerrero

 

Artículo incluido en la revista de marzo de Agenda de la Empresa