“Lo más preocupante de todo es que los nuevos pedidos recibidos no lograron recuperar una tracción significativa a pesar de la reapertura de la economía”
El sector servicios de España registró una expansión por segundo mes consecutivo en julio, pero esta solo fue leve, “ya que los niveles de nuevos pedidos recibidos fueron decepcionantes y las empresas continuaron operando por debajo de su capacidad”, según apunta un informe publicado este miércoles por la consultora Markit.
El nivel de empleo se recortó de nuevo, mientras que las expectativas permanecieron “históricamente” débiles. Los gastos operativos aumentaron “aún más”, pero la rentabilidad “volvió a estar bajo presión” ya que las empresas continuaron ofreciendo descuentos de precios.
El Índice de Actividad Comercial de julio, que se basa en una sola pregunta en la que se solicita a las empresas que comenten sobre la evolución de su actividad con respecto del mes anterior, se situó por encima del nivel de ausencia de cambios de 50.0 por segundo mes consecutivo. El índice aumentó de 50.2 registrado en junio hasta 51.9, su mejor nivel en cinco meses.
“No obstante, el ritmo de crecimiento señalado por el índice fue modesto y se situó muy por debajo de su promedio histórico”, indica el informe.
Para Paul Smith, Economics Director de IHS Markit, los últimos datos del sector servicios “resultaron un poco decepcionantes, ya que el sector solo registró un crecimiento débil y lo más preocupante de todo es que los nuevos pedidos recibidos no lograron recuperar una tracción significativa a pesar de la reapertura de la economía. La indecisión entre las empresas y los hogares a la hora de comprometerse con las ventas, sumada a los desafíos que implica el realizar operaciones en el entorno actual de la COVID-19, restringieron los nuevos pedidos en julio”.
“Las empresas del sector servicios son muy conscientes de que su comportamiento comercial en los próximos meses estará determinado principalmente por la evolución de la COVID-19. Los informes recientes de un aumento en los casos de infección, además de que algunos países están cambiando las recomendaciones para los ciudadanos que viajan a España, es muy probable que afecten fuertemente al sector turístico, que es un sector clave del país. La incertidumbre sobre la forma y la velocidad de la recuperación de la pandemia inevitablemente ha aumentado”, alertó.