Ha dedicado también 576 millones a provisiones ordinarias de crédito y adjudicados

Bankia ha obtenido un beneficio neto de 230 millones de euros en el ejercicio 2020, lo que supone un descenso del 57,6% sobre el año anterior, debido al menor resultado generado por las operaciones financieras, así como por unas provisiones de carácter extraordinario de 505 millones como consecuencia de la situación generada por la COVID-19.

La entidad apunta que la finalidad de estas dotaciones extraordinarias ha sido “reforzar aún más el balance de la entidad y contar así con una mayor flexibilidad para hacer frente a las necesidades financieras que pudieran tener en el futuro familias y empresas”. Bankia ha dedicado también 576 millones a provisiones ordinarias de crédito y adjudicados.

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha apuntado que, “pese a todas las dificultades y a que los tipos de interés han ahondado en el terreno negativo, Bankia ha cerrado un ejercicio muy positivo en términos de negocio, con importantes crecimientos en crédito a empresas, en producción hipotecaria y en fondos de inversión”.

A cierre de diciembre, la ratio de capital regulatorio CET1 fully loaded de Bankia se ha situado en el 16,17% si se incorporan las medidas de flexibilización de capital adoptadas por los organismos y autoridades competentes. Sin ellas, la ratio de capital CET1 fully loaded al finalizar 2020 ha sido del 15,48%, frente al 13,02% del ejercicio anterior, un exceso de 710 puntos básicos sobre los mínimos regulatorios exigidos para 2020.

Bankia ya que tiene tomados más de 22.900 millones del Banco Central Europeo (BCE) a través del TLTRO III y el coeficiente de cobertura (LCR) avanza y se eleva hasta el 195%.

Por su parte, la tasa de morosidad se ha situado en el 4,7% en 2020, frente al 5% en que se encontraba un año antes, y la ratio de cobertura sube 4,2 puntos porcentuales con respecto a diciembre del año 2019 y alcanza el 58,2%.