El Grupo BFA-Bankia ha cerrado la venta de una cartera de créditos fallidos con un valor de 126 millones de euros y compuesta por 16.000 contratos. Se trata de la segunda operación de estas características que el banco materializa en menos de tres meses.

La entidad firmó a finales del pasado mes de julio la desinversión de una cartera de préstamos fallidos, procedentes de pymes y de particulares, por un importe de 800 millones. Con esta nueva operación, BFA-Bankia ha traspasado en tres meses créditos fallidos por importe de 926 millones desde julio.

Ahora, BFA-Bankia cede el mencionado paquete de créditos para compra de automóviles al grupo inversor noruego Aktiv Kapital, que ya participó en la compra de la cartera de préstamos del Grupo el pasado mes de julio, junto con la firma luxemburguesa Oko Investments.

La operación que acaba de cerrar el banco supone el traspaso de un conjunto de préstamos procedentes de Finanmadrid, establecimiento financiero de crédito controlado al 100% por BFA-Bankia. Todos los créditos están ligados a la adquisición de un automóvil y tienen una antigüedad media que ronda los cuatro años. Por un lado, el 77% de la cartera está formada por créditos de autos puros y el restante 23% procede de préstamos al consumo. 

Esta desinversión tendrá un impacto positivo tanto en la cuenta de resultados del banco, puesto que los préstamos están totalmente dotados, como en términos de capital.

La operación se enmarca dentro del plan de desinversión en activos no estratégicos. En el plazo de tres años, Bankia se ha fijado el objetivo de reducir los activos improductivos a la mitad, hasta situarlos en 30.000 millones de euros, como anunció el presidente del grupo, José Ignacio Goirigolzarri, durante la Junta General de Accionistas.