Pocas sorpresas sobre las previsiones anunciadas a principios de año. Los préstamos e hipotecas bancarios finalizaran el 2012 sin llegar a las familias y a las empresas españolas. En contrapartida, el sector privado de hipotecas urgentes y préstamos privados ha respondido eficazmente a la demanda de dinero, manteniendo su oferta abierta al 100%, lo que ha supuesto una alternativa de conseguir liquidez para miles de particulares y empresas.

Para el observatorio de la sociedad, la economía y la financiación de los bancos, financieras y el capital privado  de la entidad y despacho de servicios jurídicos y  financieros, abogados,  www.cliffordauckland.es, Clifford Auckland consultores de hipotecas, préstamos y créditos urgentes de dinero urgente de capital privado y dinero privado, el año 2012 ha deparado pocas sorpresas sobre las previsiones realizadas hace 12 meses, al comienzo del año.  Familias y empresas españolas han continuado buscado sin éxito dinero para reflotar sus economías  y para subsistir en las entidades financieras.  Muy al contrario que el sector bancario, el crédito privado ha multiplicado sus esfuerzos por llegar a todas las personas y empresas necesitadas de dinero, manteniendo completamente abiertas sus propuestas de crédito, como única alternativa a las situaciones más graves.

Como se preveía, el crédito bancario a hogares y empresas no se ha recuperado en todo el año. Los últimos datos reflejan un acusado descenso en los préstamos bancarios que han batido su propio récord en cuanto a escasez de concesiones, sumando 30 meses de descenso continuado.

En contraprestación el crédito privado ha continuado su escalada de crecimiento. El sector ha sabido adaptarse al momento económico y a las necesidades del mercado, de los hogares y de las empresas, para mantener abiertas todas sus posibilidades de gestión a la hora de conseguir hipotecas. Sus condiciones se han mantenido – DNI y Escrituras- y se han flexibilizado las condiciones y mejorado notablemente las facilidades de amortización. Para muchas familias y empresas la propuesta del sector privado ha supuesto la única vía para obtener dinero y evitar daños mayores producidos por la falta de liquidez, que obliga a malvender o caer en un desahucio por impago. En la mayoría de los casos ha supuesto un remedio temporal y un desahogo para poder continuar adelante a la espera de tiempos mejores.