Cat Real Estate, que continúa con su modelo de expansión y se posiciona como una de las consultoras más activas del sector en la ciudad de Barcelona, cierra 2012 con un patrimonio inmobiliario administrado de 240 millones de euros y operaciones inmobiliarias intermediadas por valor de 12 millones €.

El grupo, que ha cerrado el año con buena nota, ha asesorado a un grupo familiar en la venta de un local en Barcelona. La operación de la venta del local, ubicado en la calle Gran de Sarrià 45, se ha cerrado en una rentabilidad del 6,5 %. El local está alquilado a la empresa Xocolat Box y ha sido reformado de manera integral.

Los inversores gestionados por Cat Real Estate han vuelto a estar activos en la compra de activos inmobiliarios en Barcelona y Madrid durante todo 2012. En concreto, se han invertido 12 millones de € en Barcelona y Madrid, en locales comerciales prime, con rentas garantizadas y inquilinos de primer nivel.

Los inversores sólo están interesados en comprar activos realmente bien ubicados, con paso de clientes garantizados (a ser posible turistas) y donde el inquilino no tenga fuerza para exigir descuentos en las rentas. De todos los locales comerciales que gestionados en ninguno ha sido preciso rebajar el alquiler. Por el contrario, en las oficinas administradas por nosotros la rebaja media es del 20 % y en naves industriales del 40 %. Estos dos subsectores están notando la crisis de una manera directa y las previsiones son pesimistas”, señala Nacho Castella, Socio Director de Cat Real Estate.

La no creación de nuevas empresas y la destrucción del tejido industrial de las pymes está dejando los polígonos industriales con naves vacías que los inversores no quieren adquirir. Debido a ello, los inversores prefieren comprar locales prime a rentabilidades más bajas pero con inquilinos solventes.