Hemos pasado el más amplio periodo anual de vacaciones bajo la sombra de la tragedia de Barajas y los avatares de la compañía Spanair. Viví un doble destrozo de mi maleta y me sorprendí con las declaraciones de los trabajadores de "Newco Airport Service", concesionaria de equipajes, "diciendo que ellos no eran Spanair, sino una concesionaria, respondiéndonos de mala manera y con mal estilo y burla. Sugerí a la dirección de comunicación que interviniera porque es de manual que en una situación de crisis, es básico mejorar la comunicación con los clientes. En el lado opuesto, viajando con la compañía Pullmantur, en el buque Zenith, camino de la croata Druvocnic, un pasajero sufrió un amago de infarto, prestado los primeros auxilios por el médico del crucero, el barco se desvió de la ruta a la isla más cercana, para que un guardacostas recogiera al enfermo, acompañado del médico al que tuvimos que esperar para continuar la ruta. El capitán de la Rosa, estuvo atento al acontecimiento y nos tuvieron informados en todo momento.

Pero, nobleza o página obliga y volvamos a nuestros quehaceres habituales. El verano nos ha traído las consabidas críticas de miembros del Consejo Audiovisual por la falta de neutralidad de Canal Sur. Una vez superado (al menos mediáticamente) el "affaire" de las comilonas principescas de algunos de sus miembros, que ha llevado al coordinador general de Izquierda Unida, Diego Valderas, a declarar "que tanta comida les puede sentar mal". Una de las primeras medidas que ha tomado el nuevo presidente del organismo ha sido destituir al secretario y exdirector del Instituto de Administración Pública, Juan Luque, ante la sospecha de haber desvelado el escándalo de las facturas copiosas. Esperemos que el catedrático de Ciencia Política de Granada y director del Centro de Análisis y Documentación Política y electoral de Andalucía, Juan Montalbes, cargos que habrá abandonado para presidir el CAA, tome una segunda iniciativa, austeridad en el gasto público como reclama la situación económica del país.

Televisión Española, que ha cambiado su logotipo, con pésimo gusto e infundado criterio, en mi opinión, anuncia reducir a 9 minutos/hora la publicidad hasta 2010, las cadenas privadas le piden siete minutos. Y mientras un estudio, (ver Diario de Sevilla 13 de septiembre de 2008), en plena desautorización al "referéndum" del lendakari vasco, revela que en los últimos años las televisiones autonómicas catalana TV-3, valenciana Canal 9 y vasca ETB, han reducido notoriamente su cuota de pantalla. La realidad lingüística y la demanda de la audiencia se impone a las imposiciones políticas.

Otro estudio, de Corporación Multimedia, revela que casi un tercio de la programación de las televisiones generalistas se destinó a informativos y magazines. Donde se incorporan los nuevos formatos en directo de programas de larga duración. La mayor caída en tiempo de emisión la protagonizaron los concursos, que bajaron en la temporada 2007/2008 a la mitad desde un 12,6 inicial. La ficción nacional, con las series dramáticas, superó globalmente en audiencia a las series americanas, lo que demuestra la buena salud de nuestras producciones, que tuvieron origen en las grandes obras teatrales de la televisión pública, entonces sin competencia. Si bien, es el cambio de imagen de Bea (la no tan fea), la ficción más vista tras algún episodio de médico de familia o de farmacia de guardia, en la historia. Y perdónenme que termine con un bochorno que haría sonrojar desde sus tumbas a nuestros humoristas de gloria. ¿Quién les habrá dado el carnet del gremio a los cuentachistes de las tardes de Canal Sur? Lo cuenten bailando, siempre igual por cierto, o bajo las continuas carcajadas de "la locutora y periodista" María del Monte. Supongo por aquello, de mientras me lo lleve…

Para colmo de comparación, el programa incluye "gags" de artistas que se ganaron todo el respeto, como "el mago Pepe Carrol", o el también malogrado, menor, del dúo Sacapuntas. Que dirían Col, Tip, Gila, Sumers, Chumy Chumez, o el propio Chiquito de la Calzada… Para tomárselo a broma si no nos costase dinero a los contribuyentes, estas "payasadas" de Canal Sur, que sonrojan a otros canales televisivos. Deberían de permitirnos la devolución alícuota de nuestras contribuciones. Para terminar se anuncia que Lepe y sus habitantes serán contenido de una serie televisiva, esperemos que vaya en serio…

fsegundo@iberpar.com