En la España televisiva en blanco y negro, las telenovelas eran un género muy cotizado, clasificadas en la estructura programática como dramáticos. Eran herederas de tardes y noches, e incluso espacios matinales, de grandes audiencias que lloraban con los oidos pegados a las radios, luego "transistores".

Tras un paso intermedio en que los episodios sudamericanos hacían su agosto particular para distribuidoras intermediarias, por su bajo coste inicial, hoy las telenovelas inundan las parrillas de los diferentes canales en abierto y parte de la tarta digital, con canales exclusivos para el género. Mirando el éxito de nuestra versión de ‘Yo soy Bea' (TELE 5), la reedición de ‘Cuéntame ..' o la de ‘Amar en tiempos revueltos' (TVE), el anuncio de la serie ‘Quart' (Antena 3), raro es el día que la prensa no nos habla de alguna serie en cartera, de reprogramación o estreno; tales son los casos de ‘Gominolas', la juvenil ‘Verónica Mars', ‘Cuenta Atrás', ‘Cuestión de Sexo', etc. Por lo que podemos decir que todas las cadenas se apuntan a la emisión de estas producciones. Entre las que hay que incluir las compras de externas y las de animación. El fenómeno ha llegado también a las locales, con reemisiones en segundos o terceros pases de series de éxito, en canales de mayor cobertura.

Con la llegada de las televisiones autonómicas y las privadas al término de la década 80, productoras nuevas independientes que se empiezan a ‘independizar' del modelo monopolístico de TVE, espejo en el que se miraron no pocas autonómicas, se lanzan a series de ficción. Si bien en honor a la verdad hay que reconocer que igualmente las autonómicas realizarán producciones propias, caso de las catalanas ‘Poble nou' o la ‘saga de poder' (TV3); y la serie vasca ‘goenkale' de ETB, dedicadas a temas cotidianos, cercanos al espectador: un barrio, el cava o una familia impregnada en la actualidad informativa. Sin olvidar las series andaluza ‘Plaza Alta' y ‘Arrayán', que anuncia su vuelta.

Un punto de inflexión ejemplar en su diseño, ocurre con ‘Médico de Familia', no tanto por su éxito que también, sino por su concepción y elaboración. La unión de Globo Media con el Gabinete de Estudios de la Comunicación Audiovisual, incorporado de forma entusiasta el colega profesor y antiguo compañero, en la inolvidable etapa de RNE – Radio 3, José Miguel Conteras, junto a otros profesionales, sientan las bases de otra forma de hacer y entender la televisión. Parten del estudio minuto a minuto de la audiencia televisiva española y su comportamiento ante las series, como asimismo de antecedentes americanas de éxito como la ‘Hora de Bill Crosby'. Y llegan a la conclusión tras las investigaciones de mayor duración para los capítulos ( 60 minutos que abarata coste y mantiene mayor audiencia), la separación en tres actos con 2 bloques de anuncios y en los que se potencia al máximo la conclusión de cada uno, para mantener en vilo a la audiencia. De ahí a la selección de un médico de la seguridad social (Emilio Aragón) muy vinculado a toda la población, con hijos de diferentes edades, un sobrino y abuelo para hacer cómplices a los diferentes target de audiencia, había solo un paso. Faltaba solamente mantener un climax sin resolver, y deciden enviudarlo, lo que generará la emotividad y solidaridad del espectador y la posibilidad de un nuevo amor, en la persona de la cuñada que le ayudará en el cuidado de lo hijos. Los personajes dan lugar obviamente a todo tipo de peripecias y posibilidades para los guionistas de vincularse a la actualidad para mayo credibilidad. Una biblia (libro de la serie), que contiene argumentos, tramas, descripción de cada personaje, conflictos, gustos, etc, servirán de base para que la factoría de guionistas con un responsable al frente, vayan construyendo los capítulos, para cuyo final se ensayan diferentes resoluciones que se pulsan sobre espectadores tipo, antes de su decisión definitiva y cuyo equipo se irá intercambiando para ganar en frescura.

Me entero al preparar este artículo que en Cuba han triunfado este verano las series americanas. Que en el mes del Ramadán se han preparado series en diferentes paises árabes para reunir a las familias ayunantes frente al televisor, con mensajes muy claros para las conveniencias políticas; o que en la Venezuela de Cháves, tras el cierre de la histórica Radio Caracas Televisión, (famosa entre otras cosas por la telenovela Kassandra), gran parte de los espectadores han considerado tan graves como dejarlos sin comida, sustituir las telenovelas por programas del "gobierno popular". El tema que ha motivado el título, merecerá un segundo capítulo. Mientras tanto, pongamos una teleserie en nuestra vida o convirtamos nuestra vida en una telenovela que con la que está cayendo en el Patio ‘Mundi', no será difícil.

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