El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) hicieron un llamado urgente a Estados Unidos a poner fin a la incertidumbre fiscal que impera en los mercados internacionales debido al cierre parcial de su gobierno.

Reunión del Banco Mundial
Reunión del Banco Mundial

Al concluir su asamblea anual conjunta, los organismos coincidieron en que hace falta una acción inmediata para aplacar las preocupaciones fiscales a corto plazo.

En el discurso de clausura del evento, el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, recordó que quedan apenas cinco días para llegar a un “momento muy peligroso”, que supondría el incumplimiento del gobierno estadounidense con sus acreedores.

“Urjo a los políticos estadounidenses a acordar una pronta resolución antes de que alcancen el plazo de la deuda. Cuanto más nos acerquemos a la fecha límite, mayor será el impacto para el mundo en desarrollo”, advirtió.

Kim recordó que la falta de acción podría causar una escalada de las tasas de interés, una caída de la confianza y una desaceleración del crecimiento mundial.

Agregó que de ocurrir, la suspensión de pagos tendría efectos desastrosos para las economías emergentes y que esto, a su vez golpearía a los países industrializados.

En este sentido, Kim conminó a los legisladores estadounidenses a evitar dicha crisis.

La deuda federal de Estados Unidos asciende a 16,7 billones de dólares.