¿Principio del cambio? ¿Comienzo de la recuperación económica? ¿Mejora de las cifras de empleo? ¿Generalización del crédito? ¿Crecimiento del número de autónomos? ¿Asentamiento de políticas que fomenten el trabajo por cuenta propia? ¿Posicionamiento de las organizaciones de autónomos?

Inés Mazuela
Inés Mazuela

2013 ha resultado ser un año de cambios, legislativos, políticos, económicos…que parece que nos vuelven a traer cierta esperanza para el próximo año. Indudablemente, no notaremos signos reales de recuperación económica todavía, y por supuesto que queda mucho pendiente y por hacer, pero 2013 parece que ha dado los primeros indicios y esperamos que no sean puros espejismos.

Este fin de la recesión, ha conllevado un descenso en la inflación más acorde con la realidad económica actual de España. Los buenos datos, tanto del IPC, del PIB, como en la afiliación, nos hacen ver con cierta esperanza el final de este año y el próximo 2014.

A nivel legislativo, 2013 ha estado marcado principalmente por la tan anunciada y esperada Ley de Emprendedores. Esta norma ha supuesto importantes novedades en el ámbito del trabajo autónomo tales como la llamada “tarifa plana” para los nuevos autónomos y el establecimiento del criterio de caja en el marco del IVA. Pero para los autónomos, esta Ley no cubre todas las expectativas que se habían creado, ya que deja muchos aspectos sin resolver o con soluciones no del todo satisfactorias.

Otra de las referencias normativas estatales que ha visto la luz este año y que viene a dar respuesta a una de nuestras demandas, es la reciente Ley de de garantía de la unidad de mercado, de la que esperamos suponga una reducción efectiva de las trabas administrativas con las que nos encontramos para iniciar y ejercer una actividad económica.

Andalucía ¿Próspero Año Nuevo? Para nuestro colectivo, es alentador, comprobar que la economía andaluza pueda presentar cifras positivas por primera vez desde el comienzo de la crisis; nos hace ver un poco de luz. De hecho, todos los sectores productivos presentan datos positivos, excepto la construcción. Con todo, debemos permanecer alerta y no relajarnos en estos momentos. La traducción de estos datos en el día a día de nuestros autónomos, todavía tardará en notarse. Es el momento de seguir trabajando, reafirmar las políticas de apoyo al trabajo autónomo, sobre todo la apertura del crédito, imprescindible para el mantenimiento de los profesionales que trabajan por cuentan propia. Así, parece ser que 2013, será el primer año desde el comienzo de la crisis, que presente cifras positivas en cuanto a la afiliación lo cual viene a confirmar que el trabajo autónomo se consolida como la principal vía de salida del desempleo y de acceso al mercado de trabajo.

2013 ha estado marcado principalmente la firma del I Pacto sobre el Trabajo Autónomo entre el Gobierno andaluz y las entidades representativas del trabajo autónomo y empresariales y organizaciones sindicales. Con este Pacto y en palabras del entonces Consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Antonio Ávila,  “se considera por primera vez de manera específica a este sector y sus agentes económicos y sociales, y se reconoce el papel clave que juegan en la economía andaluza, acordando una estrategia de apoyo e impulso económico que les permita superar la coyuntura de crisis en las mejores condiciones posibles”.

No obstante, no se han llevado a cabo todas las medidas que consideramos necesarias y de importancia para los autónomos andaluces. Este 2013 se han quedado muchas cosas por el camino. Principalmente la falta de desarrollo de la Ley Andaluza de Promoción del Trabajo Autónomo que aunque en su texto marcaba un claro calendario para ello, no se ha cumplido. Así, queda pendiente la constitución del Consejo Andaluz de Trabajo Autónomo, la elaboración del Plan Estratégico que recoja las ayudas al establecimiento y al mantenimiento de forma estable y medidas específicas para el fomento de la Seguridad y Salud en el trabajo autónomo. No debemos olvidar, que desde su publicación, el 31 de diciembre de 2011, esta norma marca la hoja de ruta del trabajo autónomo en nuestra comunidad y no se ha llevado a efecto.

Con todo, esperamos que el próximo 2014, vea este desarrollo normativo, por fin. Y para ello, confiamos en el nuevo ejecutivo andaluz, porque 2013 en Andalucía, ha estado marcado sobre todo por el cambio de Gobierno.

El discurso con el que los nuevos representantes del ejecutivo andaluz han comenzado su andadura, también nos da esperanza. La presidenta de la Junta de Andalucía, en su debate de investidura anunció que su Gobierno pondría en marcha medidas que responden a muchas de las reivindicaciones que desde nuestra entidad venimos reclamando reiteradamente. Uno de los anuncios más relevantes para nosotros ha sido la creación de un instrumento público que facilite financiación a los proyectos empresariales y que aplique las recomendaciones del Grupo de Trabajo sobre creación de un Instituto Público de Crédito Andaluz y que parece, será una realidad inminente. Esta es una de las medidas más necesarias y determinantes para fortalecer el tejido productivo andaluz y a los autónomos que lo sustentan: facilitarles la financiación para que puedan mantenerse en sus actividades, ampliarlas, modernizarlas, hacerlas competitivas…para poder volver a la senda del crecimiento y de la creación de empleo.

Para el nuevo consejero de Empleo “los emprendedores son la “base” del crecimiento económico, y la mayor parte de ellos, cuando comienzan, lo hacen como autónomos” y desde su Departamento se anuncia la elaboración de un proyecto de Ley de Emprendedores de Andalucía y a la aprobación de un Plan de Actuación del Trabajo Autónomo. Esperemos que así sea.

No obstante, si el discurso, tanto de la presidenta, como de Sánchez Maldonado se ve plasmado en políticas y medidas concretas puede que nos encontremos ante un momento crucial para el futuro de los autónomos y autónomas de Andalucía.

En el contexto socioeconómico actual, el fomento del trabajo autónomo en Andalucía, es algo absolutamente imprescindible ya que está siendo una de las pocas formas de trabajar que encuentran los andaluces. Tal y como el consejero ha reconocido, la tasa de desempleo en nuestra comunidad es aún muy elevada, aunque hayamos visto ligeros signos de mejoría en los últimos meses. El consejero ha marcado como objetivo promover el crecimiento económico y la generación de empleo, impulsando los factores productivos. Y esto pasa ineludiblemente por fomentar el autoempleo y apoyar al mantenimiento de los autónomos andaluces. Andalucía no podrá reactivarse económicamente, sin el refortalecimiento de nuestro colectivo. Son los autónomos los que mueven la economía andaluza, los que generan el tan deseado y tan necesario empleo. Empleo, que debe ser de calidad. Así que cuanto mejores y más fuertes sean nuestros autónomos, mejores, más estables y de más calidad, será el empleo que generen. Y lo generarán. Si reciben ese empuje, lo harán.

Sin embargo, los Presupuestos Generales de Andalucía para 2014, prevén un recorte del 25% de dotación en materia de trabajo autónomo, lo cual resulta, cuanto menos, bastante llamativo, teniendo en cuenta los anuncios que el ejecutivo viene realizando. Resulta desalentador que las políticas activas que promete el Gobierno Andaluz, no puedan ir acompañadas de una dotación económica que verdaderamente apoye a los trabajadores y trabajadoras autónomas de Andalucía. Esperemos que el recorte al que se han visto sometidas las partidas destinadas a estos fines, afecte lo menos posible y que a pesar de la disminución presupuestaria, las políticas anunciadas lleguen a ser una realidad y puedan ejecutarse de forma efectiva y con resultados positivos.

Que la ilusión, la esperanza y el trabajo guíen a los autónomos andaluces en el nuevo año. Nunca dejemos de soñar.

Inés Mazuela Rosado, secretaria general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos de Andalucía