Por primera vez, desde el comienzo de la crisis, el Régimen de Autónomos cierra un ejercicio con cifras positivas en nuestra comunidad, y además con una cifra de ascenso bastante considerable. Del total nacional, Andalucía ha supuesto el 40,7% del ascenso en el RETA en 2013, según los datos ofrecidos por la Seguridad Social. Así que podemos afirmar, tal y como veníamos previendo, que, no sólo en porcentaje sino también en valor absoluto, nuestra comunidad autónoma ha generado, este año que acabamos de terminar, más autónomos que cualquier otra.

Inés Mazuela
Inés Mazuela

Por sectores de actividad, sólo cuatro de los 21 presentan cifras en negativo, es decir, han perdido afiliación respecto a 2012, aunque con cifras poco significativas, incuso en el sector de la construcción, que aunque sigue perdiendo efectivos en 2013, no ha sido tan acuciado como en años anteriores. Así los sectores que presentan descenso en la afiliación son industria extractiva (-16), industria manufacturera (-338), suministro de agua, actividades de saneamiento, de gestión de residuos y descontaminación (-4) y construcción (-1.099).

El resto de sectores, han aumentado en afiliación en Andalucía en 2013, destacando el sector de comercio con un aumento de 3.791 efectivos, seguida de las actividades profesionales, científicas y técnicas, con un aumento de 2.409 y las actividades sanitarias y servicios sociales con 1.154 afiliados más.

Asimismo, todas las provincias andaluzas han crecido en lo que al número de autónomos se refiere, siendo Málaga y Granada las que han experimentado un mayor incremento frente a Jaén y Córdoba que han sido las que menos han aumentado.

Esperamos que este crecimiento se mantenga en el tiempo y suponga un verdadero cambio de tendencia. De nuevo los autónomos nos mostramos como los verdaderos generadores de empleo, de ahí la importancia que tienen las medidas que se adopten con respecto a nuestro colectivo. En cierto modo, este previsible y deseable cambio de tendencia, tiene mucho que ver con las últimas medidas aprobadas, en particular las reducciones y bonificaciones de cuotas a la Seguridad Social que se aprobaron con la Ley de Emprendedores; la famosa tarifa plana, ha animado a muchos a dar el salto y emprender como autónomos al reducir los costes iniciales. Pero no podemos quedarnos aquí. Es una realidad, que ante la situación de crisis que vivimos, muchas personas han visto en el trabajo autónomo la única salida del desempleo. De hecho, casi 60.000 nuevos autónomos capitalizaron su prestación por desempleo en los tres primeros trimestres de 2013. Pero tampoco podemos olvidar que como consecuencia de la crisis o auspiciándose en ella, muchos autónomos no lo son por elección sino porque es más ventajoso para sus empresas que así pagan menos impuestos por ellos y los “obligan” a cambiar de régimen aceptándose esos trabajos porque no les queda otro remedio, provocando que muchas de estas nuevas altas sean en realidad “falsos autónomos”.

En este sentido, el Parlamento Europeo, ha aprobado una Resolución que aboga por establecer mecanismos que no permitan esas prácticas reconociendo que todos los trabajadores merecen garantías y protección social y pide diferenciar los autónomos de los asalariados, con el objetivo de proteger las ventajas de este tipo de trabajo, su actividad económica y contribuir al desarrollo del espíritu empresarial y la calidad de los servicios. De hecho, los parlamentarios consideran necesario que los Estados miembros identifiquen claramente el falso trabajo autónomo y sancionen a los empresarios si se constatan y acreditan tales casos.

Pero quizás lo más destacado de este texto normativo europeo, sea el reconocimiento del papel clave del creciente número de trabajadores autónomos en la reactivación económica europea tras la crisis en toda Europa. Y en este caso, Andalucía no sólo sigue esta tendencia sino que se presenta con cifras realmente positivas.

Por todo ello, hay que reforzar las políticas de apoyo al trabajo autónomo ahora más que nunca. Los  Gobiernos, tanto el estatal como el autonómico, siguiendo las recomendaciones europeas, tienen que comprometerse en consolidar esta tendencia de regreso a la senda del crecimiento del trabajo autónomo. Los autónomos somos empleo y creadores de empleo; somos el principal factor de creación neta de trabajo.

Para ello, debemos alcanzar un aumento de en torno al 5% en los próximos años en cuanto a la afiliación para consolidar esta tendencia y recuperar la expansión del empleo en general. Por todas estas razones desde UPTA Andalucía seguiremos luchando por los autónomos andaluces.

De hecho, los anuncios realizados por el nuevo ejecutivo andaluz, nos hacen ver con esperanza este nuevo año, aún habiéndose recortado la partida presupuestaria en las políticas de fomento y apoyo al trabajo autónomo. En este sentido, confiamos en la ejecución de estas medidas como la puesta en marcha del ICO andaluz, la iniciativa de simplificación de trámites administrativos referentes a la puesta en marcha y desarrollo de las actividades económicas, el desarrollo del Pacto por el Trabajo Autónomo en Andalucía, el desarrollo de la Ley Andaluza de Fomento del Trabajo Autónomo…

UPTA Andalucía, estará, no obstante, alerta de la puesta en marcha de estas iniciativas y su ejecución, defendiendo a los autónomos andaluces, como venimos realizando desde hace más de una década. Tiempo en el que nos hemos consolidado como una de las entidades más representativas del trabajo autónomo en nuestra Comunidad, tal y como demuestran los resultados obtenidos en el balance anual que estamos elaborando del año 2013, los cuales son los que nos hacen afrontar este nuevo tiempo con más ilusión y ganas si cabe, en nuestra línea de actuación, que es la que nos demandan nuestros autónomos.

Inés Mazuela Rosado, secretaria general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos de Andalucía