Revisando el artículo que escribí el pasado año, me he dado cuenta de que otra vez quería reflexionar sobre el cambio. Realmente si queremos crecer, el cambio tiene que estar presente en nuestras vidas y en nuestras organizaciones. Durante el 2006 hemos intervenido en empresas y organizaciones siendo facilitadores del cambio y siempre partiendo de esta premisa: “si seguimos haciendo lo que hacemos siempre, continuaremos consiguiendo lo que conseguimos siempre”; el cambio es difícil y por ello debe plantearse como un proceso en el tiempo y preferiblemente con apoyo especializado. Hay muchas formas de facilitar el cambio y hoy me detendré en la creatividad como descubrimiento hacia el cambio.

La creatividad, bien dirigida, siempre da respuesta a situaciones complejas y se consiguen cosas increíbles. Ahora bien, “¿La creatividad es cosa de algunos o bien, en cierta medida, todos podemos ser creativos?”.

Reflexionando la respuesta a esta pregunta creo que tendríamos que ir a la naturaleza de la creatividad; qué es la creatividad: ¿una habilidad?, ¿una característica personal?, ¿una competencia?, ¿un hábito?, ¿una actitud? Personalmente me inclino a considerar la creatividad como una actitud frente a las situaciones de la vida. Cuando alguien empieza a sentir curiosidad, a hacerse preguntas sobre una situación, quiere decir que tiene una actitud creativa y esto es el inicio del desarrollo creativo.

Uno de los grandes creadores de la Humanidad, Leonardo de Vinci, se hacia continuamente las ingenuas preguntas: ¿por qué? ¿cómo? ¿de dónde? ¿a dónde? ¿cuándo?, que le ayudaban a descubrir nuevas formas de ver los problemas. Podemos decir que tenía una gran curiosidad, pero sobre todo era su actitud constante por conocer, combinar, de especular posibilidades y de crear lo que le empujaba hacia delante. La curiosidad de los grandes genios creativos siempre ha sido muy grande, y está claro que en la historia de la humanidad siempre ha habido personas creativas que han empujado con sus ideas a la humanidad hacia los logros actuales, pero volviendo a la pregunta del inicio: ¿Todos somos creativos?, la respuesta es Sí, todos somos creativos.

Ser creativos significa utilizar la capacidad de nuestra mente para transformar una idea con otra, cambiando la perspectiva o jugando hábilmente con nuevas formas de enfocar las situaciones, combinando sin miedo nuestros conocimientos y experiencias, probando lo inaudito; y esto todos somos capaces de hacerlo. La historia de la humanidad está plagada de casos creativos. No vayamos a buscar lejos, mírese Usted mismo, piense en las veces que ha tenido que ser creativo para conseguir que sus padres le dejaran salir por la noche, para conseguir una caricia de su pareja, o para conseguir que sus hijos comieran aquello a lo que se resistían, etc. Seguro que ha utilizado este pensamiento creativo para su interés. Y seguramente que si su trabajo le facilita que Usted pueda desarrollar su creatividad, al final lo hará.

Pero, si todos somos creativos ¿porqué no lo utilizamos con más frecuencia? En primer lugar las tareas rutinarias no requieren grandes esfuerzos creativos, y esto nos protege de complicarnos la vida. Imaginemos por un momento que para beber un vaso de agua quisiéramos ser creativos, y exploráramos todas las formas posibles de bebernos un vaso de agua, lo más fácil es que al final se nos atragantara o bien se nos cayera por el suelo.

En segundo lugar, cuando necesitamos ser creativos, nos bloqueamos a nosotros mismos porque pensamos que no lo somos y anteponemos todas las barreras posibles para no utilizar nuestra mente creativa. Estos son los esquemas mentales que nos bloquean. Los esquemas mentales funcionan a modo de vocecita interior que nos impiden hacer algo, aquí solamente quisiera citar algunos:

-Solamente hay una respuesta correcta
-No hagas el ridículo
-Esta solución no es posible
-Siempre se ha hecho así
-Ya sabes que siempre te equivocas
-Si haces lo que está en las normas nunca te equivocarás
-Tienes pájaros en la cabeza
-Ya lo hemos probado con anterioridad y no funciona
-Si no sabes no te metas a buscar soluciones
-Tú no has sido nunca creativo, ni jamás lo serás

Probablemente estas y otras frases las habrá oído en algún momento de su vida, si se las cree está perdido. Estas frases o similares suelen envenenar la mente y le impiden desarrollar un mínimo de creatividad. Revise su pasado de acciones creativas, incremente su curiosidad aunque sea por deporte de conocer algo más, busque soluciones creativas a pequeños problemas, disfrute dejando vagar su imaginación por distintos derroteros tal como hacía cuando era niño y verá que pronto empezará a disfrutar de nuevas soluciones a problemas antiguos.

Utilice la creatividad para cambiar algo este nuevo año.

mailto:anaherrero@montaner.com >anaherrero@montaner.com