La Consejería de Agricultura y Pesca está estudiando la solicitud presentada por la Asociación de Fabricantes de Mantecados de Estepa (Afames) para proteger bajo la figura de calidad de Indicación Geográfica Protegida (IGP) los mantecados, polvorones, roscos de vino y alfajores que se producen en este término municipal de la provincial de Sevilla.
En el informe presentado por Afames, los empresarios argumentan que el término municipal de Estepa ha estado siempre muy ligado a la tradición y reputación de la producción dulcera española, como queda expuesto en el hecho de que existan 23 fábricas de mantecados, polvorones, alfajores y roscos de vino en la localidad.

Además, subrayan que la industria del mantecado está íntimamente ligada con Estepa, donde se utiliza el 90% de la canela que importa España. La industria del Mantecado de Estepa genera casi 2.000 empleos fijos a tiempo parcial de septiembre a diciembre, fecha de producción de estos dulces navideños.

Este tipo de empleo tiene carácter femenino, ya que las mujeres representan aproximadamente un 90% de los mismos y han estado siempre muy ligadas a la producción, envasado y comercialización de estos productos.

Para demostrar la importancia de esta industria en la creación de empleo en la comarca, Afames apunta que de los más de 40 millones de euros que facturan las fábricas, entre un 20% y un 25% está destinado al pago de mano de obra, mientras que otro porcentaje similar se dirige a industrias auxiliares de las que se nutren las fábricas.

A los puestos de trabajo directos se suman los empleos indirectos que genera la industria Mantecado de Estepa en la comarca estepeña y en sectores de las artes gráficas, maquinaria de industria alimentaria, talleres mecánicos, cartonajes y/o transportes.

La Asociación de Fabricantes de Mantecados de Estepa reseña además la reputación de la que gozan estos productos, conocidos en el territorio nacional y con peticiones de compra recibidas desde el extranjero.

La producción de las industrias que solicitan la creación de la IGP suma unos 18 millones de kilogramos, de los cuales el 54% está destinado a la venta como monoproducto y el resto (46%) es vendido en surtido.