A la hora de realizar compras online, casi cuatro de cada diez usuarios utiliza tarjetas prepago o monedero para efectuar sus pagos. Teniendo en cuenta toda la información que facilitan los consumidores en el proceso de compra, el cibercrimen sigue siendo una de las grandes preocupaciones de los clientes cuando deciden visitar una tienda de comercio electrónico. De hecho, el 53,7% de los usuarios ha sufrido alguna situación de fraude durante este año, concretamente, seis de cada diez personas han recibido invitaciones para visitar páginas web sospechosas y a un 53,3% le han enviado e-mails que ofertan servicios no deseados. Estos datos se desprenden del último “Estudio sobre la Ciberseguridad y Confianza en los hogares españoles”, elaborado por INTECO, Instituto Nacional de Tecnologías de la ComunicaciónONTSI, el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información, que tiene como objetivo analizar el estado real de la ciberseguridad y la confianza digital entre los usuarios españoles de Internet.

 

Fraude online
Fraude online

Consciente de esta realidad y con el afán de alertar a los consumidores sobre posibles estafas a la hora de realizar sus compras online, Rafael Gómez-Lus, Experto Legal de Trusted Shops en España, ofrece cinco prácticos consejos para detectar posibles páginas web fraudulentas:

 

1. Datos de contacto y de la empresa incompletos – Si la página online no tiene la información básica de la empresa a la vista, esta es la primera señal para sospechar. Todas las páginas de comercio electrónico debería incluir entre su información y sus datos de contacto: nombre de la empresa, nombre y apellido del propietario o de un representante autorizado, dirección física de la sede, número de teléfono y un email de contacto.

 

2. Precios muy bajos – En muchas ocasiones los usuarios caen en la trampa porque se dejan guiar por gangas, que resultan demasiado atractivas para ser ciertas. Cuando las páginas web tienen precios excesivamente bajos, es aconsejable pensárselo dos veces, ya que en muchas ocasiones utilizan este método como principal reclamo de consumidores confiados.

3. Pago por adelantado – En el caso de los estafadores online siempre utilizan el pago por adelantado, que es la manera más rápida de conseguir el dinero. Una vez que los clientes han efectuado su compra online no pueden volver atrás por lo que no pueden recuperar su dinero.

4. Imposibilidad de contactar – Otra de las señales de alerta que deben hacer sospechar a los usuarios es la imposibilidad de contactar con la empresa a través del teléfono facilitado en la web. Una simple llamada para comprobar que es posible hablar con la compañía en cuestión, puede ahorrar a los usuarios un mal trago y por supuesto les puede salvar de la pérdida de su dinero.
5. Comentarios negativos en foros – Comprobar en los foros si existen comentarios negativos sobre la página donde quieren comprar es la forma más sencilla para identificar si se trata de una web fraudulenta. Las experiencias de otros consumidores suelen ser muy útiles para evitar y detectar este tipo de fraudes.

 

“Es vital que las páginas de comercio electrónico pongan a disposición de los usuarios toda la información referente a la empresa, así como los datos de contacto. De esta forma no crearán confusión en los consumidores sobre la autenticidad de su tienda online” asegura Rafael Gómez-Lus, Experto Legal de Trusted Shops en España. “El hecho de contar con un sello de calidad siempre aporta un extra de confianza en los clientes, ya que de un simple vistazo los usuarios saben que es seguro hacer su compra online en ese sitio y no se tienen que preocupar de nada más”, añade Gómez-Lus.

 

Acerca de Trusted Shops

Trusted Shops es la marca europea de confianza para el comercio electrónico. Desde su fundación en 1999, la compañía, con sede en Colonia, ha certificado más de 18.000 comercios online en toda Europa. Trusted Shops verifica a sus clientes mediante una base de estrictos criterios de calidad como la solvencia, la transparencia de los precios, el servicio al cliente y la protección de datos, y, basándose en ello, concede su sello de calidad. Entre sus clientes se incluyen El Corte Inglés, Zalando, Marks & Spencer, Sarenza, Spartoo, Tradeinn, Redcoon, Panama Jack, así como una gran variedad de pequeñas y medianas empresas. Combinando la certificación, la protección al comprador, las opiniones de los clientes y la atención al cliente, se pone a disposición del consumidor un “Paquete integro de seguridad y confianza”.