El Fondo Monetario Internacional ha revisado al alza sus previsiones para España este año en su informe de Perspectivas de la economía mundial (WEO), elevando el crecimiento del país al 2%, tres décimas más de lo que señalaba en octubre, y a un 1,8% para 2016.NEW012015AS-B

A pesar del crecimiento español, el FMI apunta que las perspectivas de la economía mundial “siguen siendo poco alentadoras, lastradas por la debilidad en otros sectores, aún tras el drástico descenso de los precios del petróleo”.

La proyección del crecimiento mundial apunta a un aumento moderado en 2015–16, de 3,3% en 2014 a 3,5% en 2015 y 3,7% en 2016. Esto representa una revisión a la baja de 0,3% en ambos años en comparación con la edición de octubre.

En las economías avanzadas, se proyecta que el crecimiento aumentará a 2,4% en 2015 y en 2016. Sin embargo, este panorama sin grandes cambios oculta la creciente divergencia entre Estados Unidos, por un lado, y la zona del euro y Japón, por el otro.

Para 2015, el crecimiento económico de Estados Unidos ha sido revisado al alza, a 3,6%, gran medida gracias al robustecimiento de la demanda privada interna. Por el contrario, el debilitamiento de las perspectivas de inversión está empañando el panorama de crecimiento de la zona del euro, que ha sido revisado a la baja a 1,2%.

En Japón, cuya economía cayó en recesión técnica en el tercer trimestre de 2014, el crecimiento ha sido revisado a la baja a 0,6%. Las políticas de respuesta, sumadas al efecto estimulante del abaratamiento del petróleo y la depreciación del yen, afianzarían el crecimiento en 2015–16.

En las economías de mercados emergentes y en desarrollo, se proyecta que el crecimiento se mantendrá más o menos estable en 4,3% en 2015 y aumentará a 4,7% en 2016, un ritmo más débil que el proyectado en la edición de octubre de 2014 del informe WEO. Esta desmejora se debe principalmente a tres factores: la proyección del crecimiento de China, ha sido revisada a la baja, a menos de 7%; las perspectivas económicas de Rusia son mucho menos alentadoras, con una proyección de crecimiento de –3,0% para 2015; y en muchas economías emergentes y en desarrollo, el repunte proyectado del crecimiento de los exportadores de materias primas es más débil o más tardío de lo previsto en la edición de octubre de 2014.

La distribución de riesgos para el crecimiento mundial está más equilibrada que en octubre, señala la Actualización del informe WEO. Del lado positivo, la caída de los precios del petróleo podría brindar un estímulo mayor del previsto. Otros riesgos que podrían empañar las perspectivas son un vuelco del sentir y de la volatilidad de los mercados financieros internacionales, especialmente en las economías de mercados emergentes.

Finalmente, el FMI señala que la corrección a la baja del pronóstico de crecimiento mundial para 2015–16 pone de relieve la necesidad de incrementar el crecimiento efectivo y potencial en la mayoría de las economías. “Esto significa un firme empuje de las reformas estructurales en todos los países, más allá de que las prioridades de política macroeconómica no sean las mismas”, destaca el informe.