De acuerdo con las estimaciones realizadas, el crecimiento anual en 2015 para España será del 2,0%, un 0,1% por debajo del dato apuntado por el panel de FUNCAS, según el tercer informe Loyola Economic Outlook (LEO).
Presentado por el presidente del Consejo Empresarial de Economía, Financiación y Fiscalidad de Pymes de la CEA, Manuel Ángel Martín López, y el director del Departamento de Economía de la Universidad Loyola Andalucía, Manuel Alejandro Cardenete, su objetivo es dar a conocer las proyecciones macroeconómicas para España y Andalucía, correspondientes al primer y segundo trimestre del año 2015 y las proyecciones para el contexto internacional en los años 2015 y 2016.
En el informe se estima que el crecimiento del PIB en el primer trimestre será del 0,3% y del 0,4% en el segundo. En cuanto a la evolución de la tasa de desempleo, en el primer trimestre se proyecta un incremento del 0,9% y una disminución del 5,2% en el segundo, situándose la tasa de paro en el 23,9% y 22,7% respectivamente, con una previsión para el conjunto del año 2015 que oscilará entre el 22,7% y el 23,7%.
En cuanto al IPC, la previsión para el primer trimestre del año apunta a una bajada del 1,3% y a una subida del 1,1% en el segundo.
Previsiones en Andalucía
En cuanto a las previsiones del PIB, Andalucía muestra una tendencia parecida a la de España con un crecimiento de 0,3% y 0,4% respectivamente en los dos primeros trimestres, mientras que si se considera el año 2015 en su totalidad se estima un crecimiento del PIB andaluz del 1,9%, lo que lo situaría por debajo de la previsión nacional en un 0,1%.
En cuanto al mercado de trabajo, se estima un incremento del desempleo en el primer trimestre del 1,5%, revertiendo la tendencia en el segundo trimestre con una disminución del 2,2%. Por lo tanto, la tasa de paro en el primer trimestre se situará en el 36% y en el 32,9% en el segundo, con una proyección anual de tasa de paro que oscilará entre el 33,5% y 34,5% de la población activa.
Respecto al IPC, las estimaciones realizadas apuntan a una deflación de 1,7% en el primer trimestre y un crecimiento generalizado de los precios de 0,5% en el segundo.
Costes laborales y competitividad
A pesar de la evolución favorable de los costes laborales, el sector externo andaluz sólo ha logrado mejoras parciales. Las exportaciones totales se han incrementado de manera sostenida desde 2009, permitiendo que, “según nuestros cálculos”, las exportaciones andaluzas pasasen de representar un 0,11% del total mundial en 2007 a un 0,14% en 2013. Esto, junto con la caída de las importaciones provocada por la recesión, ha permitido que el déficit externo se redujese desde 2009.
Sin embargo, el mantenimiento del desequilibrio estructural entre compras y ventas externas, e incluso su ampliación en 2014 apuntan hacia un agotamiento de la estrategia de devaluación interna.
Si se pretende que ese sector contribuya efectivamente a la recuperación, dos tipos de actuaciones son necesarias. En primer lugar, un ajuste de las restantes variables que determinan los precios de exportación, como los costes financieros y los márgenes empresariales. En segundo lugar, una reorientación de los esfuerzos de los intentos de ganancia de competitividad en ramas de productos de gama baja y menores costes, hacia la expansión de las ventas externas en otras de gama media-alta y mayor valor añadido.
“Sólo así será posible llegar a revertir el déficit comercial externo sin sacrificar el mercado interno, promoviendo, al mismo tiempo, la paulatina transformación del aparato productivo andaluz”, argumenta el informe.