Grifols ha cerrado el ejercicio 2014 con una cifra de negocio que asciende a 3.355,4 millones de euros, incluyendo el negocio de diagnóstico transfusional adquirido a Novartis en enero de 2014. En relación con los 2.741,7 millones de euros obtenidos en 2013, los ingresos muestran crecimientos del 22,4% y del 24,1% sin tener en cuenta los efectos del tipo de cambio (cc).

El beneficio neto de Grifols ha aumentado un 36,1% hasta alcanzar 470,3 millones de euros. Representa el 14,0% de los ingresos del grupo y una mejora de 140 pb frente al 12,6% de 2013. Por su parte, el beneficio neto ajustado se situó en 597,9 millones de euros. Supone el 17,8% de los ingresos y un crecimiento del 32,8% comparado con el año anterior. 

La adquisición de la unidad de diagnóstico transfusional ha modificado los pesos relativos de las divisiones de Grifols: la División Bioscience diluye su peso hasta el 74,9% de la facturación, la División Diagnostic aumenta su participación hasta el 18,5% y la División Hospital representa el 2,8% de los ingresos. La operación se enmarca en la estrategia de crecimiento y ha permitido diversificar el negocio de proteínas plasmáticas impulsando un área complementaria. 

Los de la División Bioscience alcanzaron 2.513,5 millones de euros y muestran un crecimiento del 2,6% (4,0% cc) comparados con 2013. Grifols se mantiene como una de las compañías líderes en la producción de medicamentos plasmáticos con una cuota aproximada del mercado global del 19%. El precio de los medicamentos derivados del plasma se ha mantenido estable en conjunto y la evolución del volumen de ventas de las principales proteínas plasmáticas ha impulsado los ingresos.

La facturación de la División Diagnostic alcanzó 620,0 millones de euros en 2014. La evolución del negocio orgánico ha sido positiva y la división incrementa un 375,7% (383,9% cc) teniendo en cuenta la incorporación de la unidad de diagnóstico transfusional. Su adquisición ha supuesto la redefinición de la división, permitiendo a la compañía posicionarse para competir y liderar el área de medicina transfusional con su línea de productos de tipaje sanguíneo, tecnología NAT (Procleix NAT Solutions) y producción de antígenos.

La División Hospital mantiene su liderazgo en España como proveedor de soluciones intravenosas y progresa en su objetivo de internacionalización. Facturó 94,8 millones de euros, que suponen un descenso del 2,4% (-0,2% cc) en relación a los 97,1 millones de euros de 2013. El 73% de los ingresos de la división se concentran en España donde, a pesar de los recortes en el gasto sanitario, la facturación aumentó un 2,8% por el incremento de las ventas de las áreas de nutrición y farmacia hospitalaria.

Finalmente, los ingresos no recurrentes de Grifols que se engloban en Raw Materials and Others incrementaron hasta 127,1 millones de euros y suponen el 3,8% de la facturación. Incluyen, entre otros conceptos, los trabajos a terceros realizados por Grifols Engineering y los ingresos por royalties.

El EBITDA de Grifols, con un crecimiento del 21,1%, se ha situado en 1.047,2 millones de euros en 2014 y el EBITDA ajustado ha aumentado el 17,1% hasta 1.074,2 millones de euros. Como márgenes representan el 31,2% y el 32,0% sobre los ingresos, respectivamente.

Los recursos asignados a I+D en 2014 crecieron un 46,6% de manera directa para acelerar los proyectos en curso, en línea con lo anunciado por la compañía.

Grifols sigue adelante con la obtención de las licencias de la FDA y la EMA para poder realizar las diferentes etapas productivas en cualquiera de sus fábricas, lo que permitirá flexibilizar totalmente los procesos y optimizar eficiencias productivas. El grupo prevé contar con estas licencias y alcanzar su actual potencial en flexibilidad y escalabilidad de procesos en 2016.

También mantiene el objetivo estratégico de maximizar la utilización de cada litro de plasma y, como consecuencia, optimizar la rentabilidad por litro. Ello supone aumentar equilibradamente la cuota de mercado de las principales proteínas plasmáticas que comercializa teniendo en cuenta la eficiencia industrial. Además, continúa la política de optimización de gastos operativos relacionados con servicios centrales, si bien los gastos de marketing y ventas han aumentado debido a la mayor actividad comercial.