Kingston Digital Europe Ltd, subsidiaria de Kingston Technology Corporation, el mayor fabricante independiente de productos de memoria del mundo, ha anunciado la unidad de estado sólido 960 GB KC310, el SSD corporativo con más capacidad de Kingston.
KC310 es el recambio definitivo para HDD y su amplia capacidad permite a los usuarios almacenar un mayor número de aplicaciones e información. Cuenta con el controlador Phison PS3110-S10 de 8 canales y un procesador de núcleo cuádruple, KC310 proporciona un rendimiento SATA Rev 3.0 (6Gb/s) sin igual, ofreciendo altas velocidades de lectura y escritura e IOPS.
KC310 es el SSD ideal para servidores básicos y empresas de datacenter que buscan un mayor almacenamiento. La unidad proporciona una protección completa de los datos con Advanced SmartECC y Flash ECC. La información se puede restituir en caso de error gracias a la fiabilidad y resistencia de NAND.
Además, cuenta con un firmware que ayuda a proteger y mantener la integridad de los datos ante la pérdida de energía, de este modo la información está constantemente moviéndose a la NAND para minimizar la cantidad de tiempo que está en el caché.
“Con esta memoria, Kingston añade a su línea de SSDs de empresa una solución para usuarios que quieren o necesitan cerca de 1TB de almacenamiento”, ha dicho Tony Hollingsbee, SSD Business Manager de Kingston. “Las empresas que quieran optimizar los sistemas cliente también encontrarán KC310 ideal para servidores básicos, con una combinación de altas velocidades de lectura y escritura, IOPS, alta capacidad y una protección de datos avanzada”.
Además del K310, Kingston ofrece la serie KC300 para empresas que necesiten un software de gestión de clientes centralizado y fijar políticas de seguridad para sus SSDs. KC300 SSDs proporciona TCG Opal 2.0, IEEE 1667 y Microsoft eDrive, así como el control avanzado de la energía y atributos S.M.A.R.T. KC300 SSD utiliza el premiado SandForce SF2281 Flash controller y ofrece capacidades desde los 60GB hasta los 480GB.
KC310 y KC300 SSDs cuenta con una garantía de tres años, soporte técnico gratuito y la legendaria fiabilidad de Kingston
