La Directora Ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Ertharin Cousin, ha expresado su alarma por los recortes en la ayuda para los sirios que han buscado refugio en Jordania, así como por el deterioro que esto ha supuesto para sus condiciones de vida.

Cousin realizó una visita a Jordania en la que pudo constatar durante los encuentros que sostuvo con varias familias sirias las penurias que experimentan. Añadió que la reducción del valor de la ayuda otorgada por el PMA mediante vales, combinada con la suspensión de la asistencia de otras agencias humanitarias, ha tenido un impacto negativo en la seguridad alimentaria de la mayoría de los refugiados y muchos se han visto obligados a sacar a sus hijos de las escuelas para incorporarlos al trabajo.

La responsable del PMA llamó a la comunidad de donantes a reconocer el sufrimiento de los sirios y a continuar la ayuda que necesitan tantas familias desesperadas. Cousin también agradeció la “invaluable ayuda” ofrecida por Jordania a los refugiados sirios y reconoció las iniciativas que ha adoptado para mantener la cohesión social entre los sirios y las comunidades locales.

El PMA afirmó que necesita 45 millones de dólares para continuar ofreciendo asistencia vital a más de medio millón de refugiados sirios en Jordania.

Los cuatro años del conflicto de Siria han generado un flujo constante de casi 4 millones de refugiados a países vecinos como Líbano, Turquía, Iraq y Jordania. Esto ha sobrecargado las infraestructuras de esos países y ha provocado la creación de asentamientos superpoblados, donde muchos refugiados luchan en medio de altas tasas de desempleo y servicios precarios.