Los ingresos de Mapfre entre enero y septiembre de este año ascendieron a 20.587 millones de euros, lo que supone un incremento del 6,8% respecto al mismo periodo del año anterior, y las primas crecieron un 5,4%, hasta los 17.341 millones de euros.

El beneficio antes de impuestos ascendió a 1.162 millones de euros, un 16,2% menos que en los nueve primeros meses del año anterior, y el beneficio neto fue de 591 millones de euros (-12,1%), influido, entre otros factores, por el aumento de la siniestralidad, especialmente derivada de las tormentas de nieve de principios de año en Estados Unidos, y mayores tasas impositivas en algunos países.

El ratio combinado del Grupo mejora en 4 décimas respecto al trimestre anterior y se sitúa en el 98,7%. En este periodo destaca el crecimiento del seguro No Vida y del reaseguro, así como la contribución del negocio de Direct Line en Italia y Alemania, que aporta 207 millones de euros en primas.

Con estos resultados Mapfre ha mantenido el dividendo en 6 céntimos de euro por acción, siendo uno de los más elevados del Ibex 35. Así, los accionistas cobrarán en el año 2015 un total de 14 céntimos de euro por acción, el mismo importe que el año anterior, y la compañía destinará a retribuir a sus accionistas un total de 431 millones de euros.