Desigual cerró el año 2015 con una facturación de 933 millones de euros, cifra que supone un descenso del 3% respecto al ejercicio anterior, tras más de 20 años consecutivos de crecimiento.

Estos resultados obedecen a la moderación en las ventas y a la limitada contribución de ventas adicionales por parte de tiendas abiertas en el último semestre del año pasado.

Mientras que Francia y España registraron un descenso en su facturación, el buen comportamiento del negocio fuera de los mercados europeos (especialmente en Latinoamérica), donde la presencia de Desigual todavía es moderada, evidencia el potencial de la marca en dichas geografías, que actualmente representan un 10% de la facturación.

El Ebitda decreció un 24% respecto al 2014 situándose en 200 millones de euros (un 21% de sus ventas), fundamentalmente como consecuencia de la bajada de la facturación y del esfuerzo inversor realizado para la apertura de tiendas, especialmente en el último trimestre del 2014. El net cash de la compañía ascendió a 298 millones en diciembre de 2015, 75 millones más que en la misma fecha del año anterior.

En paralelo, Desigual inició la revisión de su modelo de negocio en el último trimestre de 2015 y puso en marcha un plan de eficiencia, que continuará durante el año en curso, con el objetivo de mejorar la rentabilidad de la compañía. La red de distribución, las geografías y las categorías están siendo sometidas a revisión para adoptar las acciones más adecuadas a este fin, a corto y medio plazo.

La compañía definió a finales de 2015 un plan estratégico de transformación a medio plazo, cuyo objetivo es preparar la siguiente fase de crecimiento de la compañía. La estrategia de transformación pasa por definir un modelo de negocio orientado al cliente, apostando por la innovación en el producto y la optimización de las sinergias entre los diferentes canales en los que opera la compañía.

Dicha transformación se materializará, en las próximas temporadas, en una nueva segmentación de la colección y una mayor renovación del producto en tienda (hasta cuatro veces por temporada) para ajustarse a la demanda del consumidor