En el ámbito de su impulso a la tecnología, la economía digital y la industria, EOI Escuela de Organización Industrial ha desarrollado el estudio ‘Las tecnologías IoT dentro de la industria conectada 4.0’ con autoría de Mario Cruz Vega, director en PWC y Pablo Oliete Vivas, gerente en Cellnex Telecom y presidente de la Comisión Industria 4.0 de Ametic (1).
Entre las conclusiones del Informe, nos encontramos:
1) Relevancia del IoT y posicionamiento de España: la industria española de Tecnología IoT presenta un potencial de crecimiento que puede hacer que este sector multiplique por seis su facturación en los próximos diez años. Nuestro posicionamiento internacional es relevante, con múltiples empresas proveedoras de soluciones en la cadena de valor de IoT y una presencia fuerte de empresas nacionales en proyectos internacionales (representando el 9% del mercado europeo occidental). Sin embargo, se observa que el crecimiento de otros mercados que han irrumpido más tarde (Francia, Reino Unido o Estados Unidos) está siendo más rápido, funcionando como tractor en el mercado, por lo que a corto plazo la posición española puede quedar rezagada.
2) En cuanto a los agentes implicados: a) el subsector de fabricantes de objetos conectados está muy atomizado, con muchísimas empresas de menor tamaño; b) los desarrolladores de plataformas y aplicaciones son un grupo muy heterogéneo, desde las grandes empresas tecnológicas a otras más pequeñas; c) finalmente, en el despliegue de redes IoT están todos los operadores de telecomunicaciones con redes propias. La prioridad no ha de ser tanto la competencia, sino más bien la cooperación u colaboración entre agentes, buscando alianzas.
3) Si bien España tiene una buena situación comparativa en el sector de desarrollo e implantación de soluciones IoT, esto no se ha reflejado en una adopción temprana de estas tecnologías en la industria.
4) Las principales barreras al despegue del IoT son:
– Necesidad de una aproximación sectorial. Se requiere de un conocimiento muy específico de los procesos de fabricación que pueden ser muy distintos de un sector a otro, e incluso entre empresas.
– La incorporación de la industria 4.0 requiere inversión, y es necesario identificar los factores clave de retorno de esa inversión (cuantificar mejoras de eficiencia y productividad, aumento de ventas por incorporación de funcionalidades diferenciales, etc.).
– Indefinición de estándares, lo que genera incertidumbre sobre qué tecnologías tendrán continuidad en el mercado y su soporte a largo plazo.
– Seguridad: no existe un enfoque claro y único para proteger los datos de las cosas conectadas. Los protocolos de seguridad habituales de internet no son adecuados.
5) Los principales sectores donde las Tecnologías IoT pueden tener un efecto revulsivo son el sector de automoción, el agrícola, el de utilities, y el de turismo.
6) Insuficiente transferencia tecnológica desde las Universidades y centros de investigación hacia los sectores proveedores y consumidores de soluciones IoT.
7) El modelo de innovación en materia de Tecnologías IoT debe ajustarse a los nuevos modelos de negocio y de emprendimiento. La innovación es un factor fundamental que debe funcionar como el tractor en todo el sector. Si bien no se trata de una regla rígida, la innovación está resultando mucho más fluida en las empresas IoT de menor tamaño, por lo que se están produciendo gran cantidad de alianzas entre grandes y pequeñas empresas de IoT.
8) En las sesiones de trabajo y entrevistas mantenidas para la elaboración del Informe, han surgido múltiples propuesta para las Administraciones Públicas:
– Necesidad de elaboración del mapa de capacidades y necesidades industriales en relación a la Industria 4.0, que recoja la oferta (empresas, agentes, asociaciones…), demanda (empresas, clústeres,…), y la elaboración de una agenda estratégica para alinear los esfuerzos de I+D+i para la industria nacional.
– Aceleración de empresas IoT.
– Fomento de la transferencia tecnológica.
– Financiación europea Horizonte 2020.
9) La industria española 4.0 requiere de profesionales especializados en las tecnologías del nuevo paradigma tecnológico a la vez que de un conocimiento profundo de los sectores manufactureros. Este cambio profundo en los perfiles profesionales se va a ver acrecentado muy rápidamente, por lo que las carreras técnicas del futuro tendrán que ser diferentes, profundizando en los conocimientos específicos de los diferentes sectores industriales y aunándolos con las competencias tecnológicas.
Está claro, pues, que el paradigma del IoT es uno de los elementos que más va a cambiar nuestra sociedad en los próximos años. Se hace muy difícil vislumbrar hasta dónde podrá llegar la revolución de los objetos conectados. La presencia de estas tecnologías en las industrias españolas es muy incipiente, pero existe un alto potencial de desarrollo dado que lo que sí se está desarrollando es un fuerte ecosistema industrial abierto e innovador en torno a esta nueva actividad industrial.
(1) El Estudio se puede descargar en Savia, el repositorio documental abierto de EOI (www.eoi.es/savia).
Francisco Velasco
Director EOI Andalucía
Escuela de Organización Industrial
