Always On advierte de la necesidad de los usuarios de recibir el correcto asesoramiento, en cuanto a seguridad digital se refiere, desde que adquieren un dispositivo móvil.
Los datos personales son muy codiciados por los ciberdelincuentes: cuentas de correo, datos bancarios… esta información cada vez más se guarda en dispositivos móviles, por lo que es fundamental protegerlos frente a ataques externos.
Si el dispositivo móvil va a ser usado por un menor, hay que protegerlo también, ya que los criminales de la red intentarán engañar a los niños en busca de otro tipo de información. Los padres o tutores deben controlar el acceso a páginas web con contenido adulto, la publicación de fotografías inadecuadas en redes sociales o descargas de aplicaciones, puesto que pueden suponer un gran problema y todo ello es consecuencia de dar total libertad a un menor con acceso a Internet.
La compañía se ha encargado de dar respuesta a esta necesidad ofreciendo un amplio abanico de servicios. Entre ellos, el asesoramiento, soporte tecnológico e instalación de sistemas de protección digital. Cada vez es más frecuente, con motivo de los grandes avances que se han dado en el sector que rodea a los smartphones, necesitar una asistencia personalizada para configurarlo y adaptarlo con las medidas de seguridad que requiere.
Para mantener a salvo toda la información almacenada en los dispositivos móviles, en primer lugar, se recomienda que la complejidad de las contraseñas sea muy elevada, para evitar filtraciones fáciles desde redes sociales o mediante el correo electrónico. En segundo lugar, es necesario leer las condiciones de uso en el momento de instalar aplicaciones o visitar páginas web, asegurarse que no se cede información comprometida o se permite el acceso de la misma a nuestro dispositivo.
Luis Ojeda, director de desarrollo y negocio de Always On, ha señalado que “los ataques digitales son evitables con los sistemas de protección y las recomendaciones de un profesional en ciberseguridad”.
