La Asamblea General de Naciones Unidas ha designado 2017 como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, recalcando la importante contribución que el sector turismo puede generar a los tres pilares de la sostenibilidad (económico, social y del medio ambiente).
La guía ISO 82: 2014 ‘Guía para abordar la sostenibilidad en las normas’, elaborada por la Organización Internacional de Normalización (ISO) es una prueba de la proactividad de la Normalización para promover la incorporación de la sostenibilidad en todos los campos, incluido el turismo. Algunos comités internacionales de normalización han abordado ya la sostenibilidad como el Comité ISO TC 268 “Ciudades y comunidades sostenibles” que cuenta ya con cinco normas publicadas que incluyen indicadores y métricas en dicha materia. Otro ejemplo, más ligado al turismo, es la Norma ISO 20121: 2012 Sistemas de gestión de la sostenibilidad de eventos. Requisitos con recomendaciones de uso.
El Comité Internacional de Normalización ISO TC 228 ‘Turismo y servicios relacionados’, formado por 87 países coordinados por el organismo de normalización español AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación), no es ajeno a esta apremiante necesidad de contribuir al desarrollo sostenible, en su caso a través de la elaboración de normas turísticas. Las normas son documentos de consenso que contienen requisitos y recomendaciones en las que participan todas las partes interesadas y que constituyen eficaces instrumentos para la mejora de la competitividad de las organizaciones. Actualmente, cuatro de los catorce proyectos de normas internacionales del Comité ISO TC 228 abordan de manera directa la sostenibilidad, en subsectores como el turismo de aventura, el buceo o el alojamiento.
A nivel nacional, AENOR dispone de un amplio catálogo de Normas UNE verticales, específicas para distintos subsectores turísticos (como el alojamiento, la restauración, las agencias de viajes, las oficinas de información turística, las playas o los balnearios, entre otras muchas actividades) que orientan y apoyan a las organizaciones turísticas en la mejora de la calidad y la competitividad. Sin embargo, no ha sido hasta hace bien poco cuando el sector turístico, y sobre todo las administraciones públicas, han sido conscientes de la necesidad de dar un paso más allá en su proceso de mejora continua, incorporando la sostenibilidad como elemento clave para garantizar la competitividad en el tiempo. La Norma UNE 178501: 2016 Sistema de gestión para los Destinos Turísticos Inteligentes. Requisitos es un claro ejemplo de ello al apostar por la sostenibilidad y la accesibilidad como ejes fundamentales de la gobernanza de los destinos turísticos, a través de la incorporación eficiente de la innovación y la tecnología en la prestación de servicios.
Existen otras normas de ámbito más general que también proporcionan soporte a las organizaciones turísticas en su apuesta por incorporar la sostenibilidad. Es el caso de la Norma UNE-EN ISO 14001, que es la herramienta de gestión ambiental más extendida en el mundo, la UNE-EN ISO 50001 de Gestión energética, la UNE-ISO 26000 de Responsabilidad social, el proyecto ISO/DIS 20400 de Compras sostenibles o las Normas UNE-CEN ISO/TS 14067 de la Huella de carbono y UNE-EN ISO 14046 de la Huella de agua, por citar sólo las más relevantes.
Natalia Ortiz de Zárate
Secretaria del Comité ISO/TC 228 Turismo y servicios relacionados
Dirección de Normalización de AENOR
