Meliá Hotels International registró hasta septiembre un beneficio neto de 92,2 millones, lo que representa un 74% más que en el mismo periodo de 2015, un incremento que se cifra en un 130% si se eliminan los efectos de los extraordinarios, a saber, la generación de 48 millones de plusvalías, y el impairment de Puerto Rico, en 2015, que impactaron en los resultados del mismo periodo de 2015.
La compañía ha reducido en 240 millones su deuda respecto a los primeros nueve meses del año pasado, con una reducción del tipo medio de interés, que se situó en el 3,6%, generando un ahorro del coste de financiación de 20,5 millones.
La reducción de la deuda neta, que se cifra en 528,8 millones, fue posible por la amortización del bono convertible y la mayor generación de caja del negocio.
Con vistas al cierre de 2016 y al 2017, la compañía espera concluir la venta de algunos activos no estratégicos del portfolio en la línea iniciada de fortalecer el modelo de joint ventures como impulsor de la estrategia de transformación de activos necesitados de grandes inversiones, contribuyendo al mismo tiempo a la calidad de las propiedades operadas en las distintas marcas, y a la intensificación del modelo de negocio fundamentalmente gestor del grupo.
