Es un acuerdo comercial que intenta facilitar el comercio entre Europa y Estados Unidos a través de varias medidas. Primero, bajar aranceles para que los productos europeos en el mercado americano sean más competitivos. Segundo, las reglas, que serían por ejemplo que Estados Unidos acepte las denominaciones de origen en el ámbito de la agricultura para que los productos europeos estén protegidos en el mercado americano. Hay otras reglas que pueden ser la aceptación de títulos de ciertas profesiones como arquitectos, ingenieros, etc. También está el abrir el mercado americano de las licitaciones públicas a empresas europeas, que hoy día está prácticamente cerrado.

Joches MullerY lo último, y eso es lo novedoso y lo más controvertido también, es una cooperación regulatoria en aquellos ámbitos donde sea posible. No queremos bajar estándares laborales, medioambientales, fitosanitarios… Lo que queremos hacer es intensificar aquellos muchos elementos de nuestras maneras de producir y hacer que atañen los mismos objetivos, pero las maneras de llegar allí son diferentes para, por ejemplo, reconocer mutuamente inspecciones fitosanitarias o maneras de producir coches en automoción… Todo eso lo queremos facilitar y reconocer y cooperar mejor en lo regulatorio.

Como puntos positivos del TTIP, destacaría el crecimiento y la creación de empleo, que es el objetivo principal; segundo, sería sobre todo para las pymes, que tienen las grandes barreras, porque las grandes empresas internacionales ya están aquí y nosotros ya estamos allá; y, en tercer lugar, es un tema para nosotros también geopolítico en el sentido de pensamos que deberíamos cooperar con un socio como Estados Unidos, y con Canadá y con otros países que comparten nuestros valores y nuestras maneras de hacer para poner los estándares globales donde los demás nos tienen que seguir en lo medioambiental, fitosanitario, estándares técnicos… y no vernos obligados en 30 años a adoptar y correr tras los estándares que nos imponen los demás (chinos, indios…), que esos sí van a ser a la baja.

Como negativo, estaría que, seguramente, con el TTIP habrá también muchos sectores con más competencia porque los americanos también podrán vender en Europa. Lo importante es que tenemos productos de calidad, que sabemos competir, y también tenemos que adaptar a ambos continentes políticas de acompañamiento, es decir, si vemos que algún sector igual puede tener problemas después del acuerdo. Y luego políticas activas de empleo como formación de los empleados, formación profesional dual, mejorar la transición de la educación tanto profesional como universitaria al mercado laboral…

En el caso de Andalucía, desde esta comunidad ya se exporta bastante a EE. UU., unos 1.200 millones anuales, y el 44% de ello se hace en agroalimentación, bebidas y tabaco, y el resto en manufactureras, bienes de equipo y crudos. La agroalimentación, todo lo que son productos procesados, tiene muchas oportunidades en Estados Unidos. Un ejemplo: aceite de oliva y aceitunas. El mayor consumidor de aceite de oliva y aceitunas del mundo es EE. UU., pero sólo produce el 5% de lo que consume. ¿Quién es el mayor productor de aceite y aceitunas? Andalucía. Pues ahí tiene un claro ‘business key’.

Lo mismo ocurre con otras frutas y hortalizas y también con el atún. Por ejemplo, este último todavía tiene un arancel del 35% y si bajamos ese arancel va a ser mucho más competitivo en el mercado americano. Y el no hacer nada también costes. Por ejemplo, Ecuador tiene un acuerdo con Estados Unidos desde hace dos-tres años donde los atuneros ecuatorianos exportan al 0% a aquel país. ¿Qué ha pasado con el atún español? Desde entonces ha caído en picado la exportación a Estados Unidos. Si queremos recuperar este mercado y aumentarlo tenemos que hacer un acuerdo como el TTIP para bajar trabas administrativas, trabas de inspección, pero también los aranceles. Luego también está Airbus, empresas que hacen cosmética, productos químicos, jabones, o mucha cerámica, que tiene todavía un arancel del 37%, que tiene productos muy buenos y muy solicitados en Estados Unidos que se podrían abaratar y vender mucho más allí. Hay muchos productos que se podrían beneficiar de ese acuerdo.

 

Jochen Müller

Analista político de la Representación de la Comisión Europea en España