Los precios de los alimentos básicos como los cereales, lácteos, frutas, verduras y carne bajaron en 2016 por quinto año consecutivo, un 1,5% menos que 2015, según un informe de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Según ese análisis, el año pasado se caracterizó por una disminución constante de los precios de los cereales, que cayeron un 9,6% en relación a 2015, favorecido por las cosechas abundantes.

En contrapartida, los precios del azúcar y los aceites vegetales subieron un 34,2% y un 11,4%, respectivamente. No obstante, la reducción de los costos de los cereales ayudó a compensar la situación.

La FAO estima que la incertidumbre económica y las fluctuaciones en los tipos de cambio seguirán influyendo en los mercados alimenticios en 2017, lo que provocaría una continuidad de esta tendencia a la baja.